Mirtha Legrand dejó en claro su enojo porque su programa no se emite desde Mar del Plata, desde donde solía transmitir sus clásicos almuerzos. La conductora, de 97 años, participó de la gala por los 30 años del hotel Costa Galana, donde se hospeda durante la temporada, y en su discurso no pudo evitar manifestar su descontento.
“Esta es como mi casa. Estoy llena de amigos acá. Además, durante muchos años hice los almuerzos desde aquí, con muchísimo éxito. No sé por qué mierd* no se hacen”, lanzó con su estilo inconfundible y desató las risas y aplausos de los presentes.
Mirtha Legrand se mostró emocionada de pasar otro verano en Mar del Plata
A lo largo de los años, Mirtha Legrand convirtió a Mar del Plata en su segunda casa. No solo por la cantidad de temporadas que pasó allí, sino también porque siempre se mostró como una ferviente promotora de la ciudad. En la misma gala, recordó su amor por “La Feliz” y la conexión especial que mantiene con la ciudad costera desde su infancia.
“Me encanta venir a esta ciudad. Desde que tenía tres años vengo a Mar del Plata, que en ese entonces era otra Mar del Plata. Siempre me ha parecido una ciudad bellísima. Estoy muy feliz de estar acá”, expresó emocionada.
Si bien la diva no suele disfrutar de la playa, aseguró que aprovecha su estadía para descansar y socializar. “No voy a la playa, pero disfruto mucho. Me divierto y hoy estoy entre ustedes, soy una más entre ustedes. Me siento totalmente marplatense. Nací en Villa Cañás, pero soy marplatense”, concluyó con orgullo.
A pesar del reclamo de Mirtha, la televisión ha cambiado y trasladar un ciclo de este calibre a Mar del Plata implica una logística compleja. Su presencia en el Costa Galana, su discurso y su pedido por volver a hacer el programa desde allí reavivaron el debate sobre su futuro en la televisión.
Ahora queda esperar si su reclamo tendrá alguna respuesta por parte del canal y la producción. Mientras tanto, la Chiqui sigue firme en su deseo de seguir en la pantalla chica y, si es posible, desde la ciudad que considera su hogar.
