En poco menos de un mes se cumplirán 10 años de la muerte de Ricardo Fort, que fue sin dudas uno de los personajes del mundo del entretenimiento y la televisión que más han marcado la cultura popular argentina.
Por más que las generaciones se actualicen y pasen los años, Fort nunca es olvidado. Su legado sigue más vivo que nunca, entre memes de redes sociales, las palabras de quienes lo han querido y sus recordados momentos virales.
Además de haber sido célebre por sus apariciones mediáticas, otro de los grandes rasgos que caracterizó a “El Comandante” fue su gusto por los lujos. Si bien se recuerda a Ricardo Fort por su inagotable amor hacia Miami, también tenía guardado un lugar en su corazón para Mar del Plata, como lo muestra la que fue su millonaria casa en el popular destino balneario.
Muy a su estilo, la vivienda del padre de Marta y Felipe en Mar del Plata contaba con todo lo que uno siempre ha soñado. La entrada a la mansión estaba marcada por un amplio espacio de estacionamiento para sus autos, entre los que se recuerdan un Mercedes, un BMW, dos Rolls Royce y tres Harley.
En el interior del inmueble, la alta gama de la propiedad se mantenía en su gran y confortable living comedor, marcado por sus sillones de cuero. Como es de esperarse de alguien como Ricardo Fort, los ambientes eran amplios y con las comodidades necesarias para sentirse a gusto.
Uno de los ambientes que también llaman la atención es la habitación. Como no podía ser menos, Fort dormía en una cama king size y tenía un lugar reservado para su enorme colección de abrigos repleta de costosos y exclusivas prendas.
En el exterior se encontraban los enormes y bellos jardines. Debido a su amplitud y buen gusto, eran el lugar ideal para que Ricky Fort llevara a cabo eventos al aire libre junto a sus amigos, gran parte de ellos acostumbrados seguramente al mismo estilo de vida que él.