El salteño, vigente ganador de Gran Hermano no solo disfruta de su fama gracias al reality o del dinero y el departamento que obtuvo de premio. También y seguro lo mejor que se pudo haber llevado es a Morita, la perrita que adoptó.
El Primo decidió adoptar a la cachorrita apenas ingresó al reality, donde se vio que entre ellos surgió una conexión muy especial. Mora lo seguía a sol y a sombra y dormía en la cama con él.
Lo cierto es que, tras terminar el concurso de sobrevivencia, Marcos se volvió a Salta y con él se fue la perrita, hermana de Caramelo, que fue adoptada por Romina, para empezar su nueva vida. El Primo mostró varias veces como el can corría y jugaba en su nuevo hogar.
A diferencia de Romina Uhrig, quien recibió miles de críticas porque se volvió viral una foto de Caramelo donde se lo ve desprolijo, Marcos no para de cosechar likes y comentarios acerca de Morita, quien no se despega ni un minuto de él.
Ginocchio ya realizó varios viajes por trabajo a lo ancho y largo del país. La última vez se fue a Bariloche con Julieta Poggio, en medio de los rumores de un romance. Lo cierto es que ambos exhermanitos tenían compromisos laborales en el sur y pasaron unos días juntos.
A la vuelta, Marcos Ginocchio siempre filma sus reencuentros con su mascota para que todos sus seguidores vean lo grande que está y el amor que se tienen.
Hace unos días, Marquitos compartió parte de su intimidad en TikTok con la pequeña integrante de la familia Ginocchio. El salteño subió un video bañando a Morita, quien se quedó quietita y disfrutó de su baño. Luego, llegó el momento el secado, donde Marcos la llenó de besos, fiel a su amoroso estilo de vida.