Si te demorabas más de 24 horas y no la devolvías rebobinada, tenías que pagar una multa. ¡Qué tiempos! Y pensar que hay toda una generación que no conoce la felicidad de haber ido al videoclub, elegir esa película que querías ver y llevártela a tu casa, para disfrutarla en familia.
Netflix se aprovecha de esta nostalgia y lanza este jueves 3 de noviembre la serie Blockbuster. Con 10 capítulos, esta serie se trata sobre la heroica y loable batalla que mantiene el gerente del último Blockbuster vivo en Estados Unidos.
La serie es creada por Vanessa Ramos, la autora de hitazos como Brooklyn Nine-Nine, Superstore y algunos guiones para los premios MTV, Golden Globes y Oscars.
Randall Park se pone en la piel del gerente de este negocio. El staff está compuesto por Melissa Fumero, Madeleine Arthur, Tyler Alvarez y Kamaia Fairbur
LA HISTORIA DE BLOCKBUSTER, APOGEO Y MUERTE
Blockbuster nació en 1985. Fue una franquicia de videoclubes que en los 90 alcanzó proyección internacional abriendo sucursales en todo el mundo.
Si un videoclub común y corriente tenía 500 títulos, los Blockbuster contaban con más de 5000. Tenían una tarjeta para sus suscriptores y vos podías elegir qué película querías directamente de las góndolas, distribuidas por el salón.
Con el advenimiento de los DVDs, Blockbuster tuvo que modernizar su catálogo. Pero el fin ya se veía venir.
La cadena se vio condenada por la televisión por cable y los nuevos sistemas de películas on demand. Netflix fue su principal verdugo, cuando, paradójicamente, en el mejor momento de la empresa, pudo comprarlo.
En el año 2000 empezó su decadencia. Los números se enrojecían cada vez más y sus directivos iban cambiando. Se metieron en el sistema on demand, pero ya era tarde. Netflix y Hulu ya habían copado el terreno.
En 2010, Blockbuster se declaró en bancarrota. Para 2017 sólo quedaban 11 tiendas en Estados Unidos y un año después, solo una, que sigue “viva” hasta hoy.
La tienda Blockbuster de Bend, Oregon sigue apostando al cine y sobrevive, gracias al turismo y a los nostálgicos. “En la era de Netflix y otras plataformas de transmisión digital, Harding atribuye el éxito de su tienda tanto al apoyo local como a la incipiente industria turística de Bend” dice un cartel en su página web.
