“Los del Espacio”, el hit que reúne a Duki, María Becerra, Tiago PZK, Lit Killah, Emilia, Rusherking, FMK y Big One, celebra la actualidad de una escena urbana argentina cada vez más potente. Y más que eso: logró un nuevo hito con sus 77 millones de reproducciones en YouTube, donde conserva el primer puesto entre las tendencias nacionales.
“Ya habíamos trabajado por separado con todos estos artistas, pero cuando recibimos la propuesta de reunirlos sabíamos de antemano que iba a ser muy importante para la escena porque se trata de un encuentro que se da una vez cada tanto”, confesó a Télam Antonio Ballvé, productor ejecutivo Anestesia Audiovisual, responsable del impacto.
El hermano mayor del director y productor Facundo Ballvé, recordó: “Ya habíamos hecho el video de ‘Entre Nosotros Remix’ (con Tiago PZK, Lit Killah, María Becerra y Nicki Nicole) que también fue un junte importante”.
“Acá también -puntualizó- el gran desafío era mostrar un poco la personalidad de cada uno partiendo, obviamente, del concepto de ‘Los del Espacio’. De ahí es que surge la idea de pensar a Big One, el productor, como el sol que está en el centro y la unión de todos ellos, pero que cada uno tuviera su imagen marcada, a partir de algo colorido que marcara esta nueva etapa cada artista”.
Los primeros pasos del director y productor Facundo Ballvé en el mundo del videoclip coincidieron en la línea de tiempo con aquellos primeros eslabones del trap argentino: por entonces, su vocación como realizador estaba más cerca del amateurismo y, secundado por una compañera de facultad, comenzó a gestar su propia hazaña retroalimentado por la sinergia que aquellos artistas empezaban a desplegar sobre la industria musical.
Anestesia hoy cuenta con un portfolio de más de 150 videos musicales que llevan la marca registrada de “Shot by Ballve”, además de funcionar como una gran estructura capaz de producir piezas publicitarias para marcas y que hasta cuenta con su propio sello discográfico.
Facundo, a la par de semejante crecimiento, tuvo que refundar su propio equipo de trabajo y fue así que terminó sumando a sus hermanos Antonio y Nicolás para que lo secundaran en la odisea de convertirse en el arquitecto visual de la escena urbana argentina.
-Sin quebrar la intimidad del rodaje, ¿qué tuvo de especial aquella jornada y el encuentro entre todos ellos?
-Antonio Ballve: Se dio algo que es muy de la escena de acá: si bien cada uno tiene sus tiempos y los rodajes en general son desgastantes y largos, se potenciaron mucho al estar juntos. La pasaron realmente bien y tienen mucha química. La toma en la que están todos juntos la verdad que fue espectacular porque realmente la estaban pasando bien todos juntos, entonces por un momento y sin perder nunca el profesionalismo terminó siendo como una celebración. Y se vivió a así. Esa fue la energía del rodaje.
-La productora fue creciendo a la par de la escena urbana nacional. ¿En qué se terminó transformando Anestesia y cuánto cambió su estructura en este último tiempo?
-Tuvimos un crecimiento en todo sentido. Particularmente hoy los equipos de trabajo son cada vez más grandes y somos cada vez más profesionales, desde el equipo técnico hasta la jefatura de producción. En todo sentido se está subiendo mucho la calidad y los estándares de profesionalismo y eso está directamente relacionado con el acompañar a la escena. Fuimos creciendo y mejorando mientras a la par de la demanda de los artistas y de sus equipos de trabajo que hoy en día también son mucho más profesionales. Hoy la estructura es mucho más grande y sigue creciendo; lo más probable es que siga en esa dirección porque sigue expandiéndose la demanda de videoclips de calidad internacional.
-¿Cómo fue que terminaron sumándose Nicolás y vos al trabajo de Facu, el menor de los hermanos?
-La verdad es que si nos hubieran preguntado hace cinco años a Nicolás y a mí si íbamos a estar trabajando en la industria audiovisual hubiera sido algo impensado en ese momento. Todo esto surge a raíz de cómo empieza él a crecer. Primero haciendo videos solo, con ayuda de una compañera de facultad, Dani Sosa, que lo ayudó un montón y formó parte de Anestesia bastante tiempo. Pero, a medida que la demanda iba creciendo, tuvo que profesionalizarse y justo se dio algo muy particular, que nuestro hermano Nicolás estaba volviendo para Argentina después de vivir un tiempo en el exterior y yo estaba laburando como abogado con mi viejo, nada que ver. Pero hay toda una cuestión financiera, contable y legal que había que atender como empresa y Facu iba a necesitar ayuda y nosotros estuvimos dispuestos a acompañarlo como familia.
-Y llegaron en un momento especial para la música argentina...
-Muchos decían que el trap y lo urbano eran una moda y que en seis meses no se iba a acordar nadie. Algunas marcas nos llegaron a decir eso; pero Facu tenía todo clarísimo porque formaba parte de eso y era su estilo de vida. Nosotros como familia también creímos que esto no era pasajero y nos la jugamos todos al cien por ciento. Dejamos nuestros trabajos. No había “plan b” y nos metimos con fe sabiendo que mañana iba a ser más grande que ayer y hasta ahora viene pasando eso. Entre nosotros hay una cuestión de confianza, nos llevamos bárbaro y no tenemos peleas.