El deseo lo busca, lo inquieta y lo impulsa a encontrar otras formas de expresión y animarse a dar el salto fuera de lo cotidiano, lejos de las noticias, la política y los temas que aborda en cada programa que conduce.
Hoy, el periodista y abogado rosarino Luis Novaresio sorprende con la edición de su primera novela, titulada “Todo por amor, pero no todo”. Es una historia de ficción en donde cruza temas universales, pero que fue inspirada por sus cortos viajes a Buenos Aires, con un joven Luis deseoso de indagar en la filosofía, como parte de su inquietud como hombre y periodista.
Y después de más de dos décadas, finalmente la historia cobró vida en este relato actual y coral, con varios personajes involucrados, atravesados por el amor, la filosofía, el deseo y la muerte.
El riesgo de hablar de amor
Luis Novaresio es uno de los periodistas más populares de la Argentina. Actualmente conduce las mañanas de La Nación +, y luego de doce años editó su segundo libro (el primero fue el ensayo “Parte de la razón”). Ahora decidió tomar la aventura de publicar su primera novela.
En “Todo por amor, pero no tanto”, los acontecimientos se viven y se leen al calor de un curso de filosofía que imparte una conocida y mediática profesora Berta Orlás en un club palermitano. Hay amor, sexo y deseo; todos quieren, a su manera, darle un sentido a sus vidas. Y, tal vez, encontrar respuesta a una pregunta: ¿podemos amar sin traicionarnos?
Uno, el protagonista, es un experto en finanzas, cercano a los 50 años. Está en pareja con C, un hombre fascinante y arbitrario. Entre ambos, la tensión no cesa: es difícil acordar un pacto que no resigne el placer de la experimentación sexual con drogas recreativas en la que Uno se inicia con C, pero que le dé a Uno una seguridad que no siente en el vínculo.
Uno se anota en el curso de filosofía que dicta la profesora Berta Orlás, a quien conoce, y admira, por su participación en los medios. Allí conocerá a Ana (coprotagonista de la novela), una ejecutiva exitosa que guarda un secreto: está casada con Héctor, pero visita los jueves un cine porno donde se presta a experiencias extremas.
Tiene una amiga del alma, Inés, que considera sórdidos los intereses sexuales de Ana, y aun así está con ella en el peor momento. También conocerá a Eva, a quien casualmente le ha vendido su departamento, una chica frágil cuyo intento de suicidio conmoverá al grupo y los unirá. Gerardo y Lourdes, también participantes del grupo de Orlás, son la pareja más convencional de esta historia: traerán a las discusiones lo que podemos llamar “sentido común”. A lo largo del curso, se irán conociendo, pondrán sobre la mesa sus vidas y sus diferencias y aprenderán a quererse con eso.
“Me gusta decir que el libro lo escribí hace cincuenta años, cuando me di cuenta que podía ordenar sujeto, verbo y predicado. La primera aparición de la idea de este libro fue hace más de 20 años, cuando vine a Buenos Aires a hacer un curso de filosofía todos los jueves. En ese entonces vivía en Rosario y me pareció que ese curso de divulgación filosófica y las personas que iba conociendo podía ser una historia. Lo comencé a escribir y lo dejé, luego hace cinco años retomé la escritura y lo dejé, hasta que hace dos años me encontré con Fernanda Mainelli, mi editora, que me propuso escribir sin el peso de publicar, si aparecía o no la historia. Y temí no poder terminarlo”, responde Luis Novaresio a Los Andes sobre su flamante novela.
-Con este segundo libro tomás un riesgo que para los que conocen tu camino periodístico es algo impensado. ¿Por qué la decisión de escribir una novela de amor, un tema que no abunda en estos tiempos?
-La decisión fue escribir ficción y no actualidad. Ni ensayo ni nada que pareciera a la coyuntura que yo abordo en el laburo de todos los días. Y después tenía ganas de escribir una historia de amor atravesada por la filosofía. Una historia que se vincula a la filosofía y fueron apareciendo distintas ideas de historias de amor, que plantearon preguntas sobre: ¿Qué es el amor? ¿Cómo se encuentra una persona con otra? ¿Qué acuerdos hay? Y demás.
-Más allá de que es una historia de ficción, tiene muchos condimentos de lo real. ¿Cuál crees que es el plus que aporta el relato para que atrape al lector?
-La historia es ficción, como dice la primera página del libro, nunca vi de frente a los personajes, apenas con dificultad los pude imaginar. El condimento que creo que puede gustar es que habla de temas universales. El amor es un tema universal, el cómo uno se relaciona con el otro, cómo uno encuentra las dificultades de amar y también de dejar de ser amado, porque hay historias de desamor. Hay un atractivo en el hecho de atravesarlos por la filosofía, sin ánimo de hacer un relato académico. La profesora Berta Orlás se ocupa de aprovechar las anécdotas que aparecen en el curso, para mirarlas desde el prisma de la filosofía.
-Hay un cruce del amor, el deseo y la filosofía permanente. En estos tiempos, ¿crees que el amor da más preguntas que certezas, al igual que la filosofía?
-Estoy convencido que el amor es antes que nada, una interpelación sobre uno mismo, no es una respuesta, no es un lugar edulcorado de refugio, de encontrar la media naranja o el otro yo. El amor te interpela, porque te hace conocerte con el vínculo con otra persona, como la filosofía. Y la filosofía es un catálogo de preguntas, antes que un catálogo de respuestas.
-¿Temiste que te tilden de pretencioso al escribir una novela, luego de un trabajo periodístico marcado por la política y la actualidad?
-Evalué las críticas, aunque estoy bastante acostumbrado a que mi trabajo periodístico sea sometido a la evaluación, de personas que me importan y habitantes de las redes sobre todo, que desde el anonimato te juzgan y demás. Es un riesgo que tomé, me importa la opinión de los que me importan. Sé que con los lectores se abre un espacio distinto y tengo ganas de explorarlo.
-Al elegir el mundo literario como otro canal de expresión, ¿crees que es un camino viable y certero frente a un periodismo cada vez más coartado por las redes sociales y la reducción de los medios de comunicación tradicional?
-No sabría qué responderte. Yo tomé el camino de la expresión, de la escritura en la ficción, como un modo de conocerme un poco más. Creo que cuando te preguntan ¿Quién sos? Tiendo a responder que no tengo claro quien soy, porque puede ser contradictorio con el mañana y el de ayer. Y, en esa contradicción, escribir me pareció un camino de búsqueda personal para saber quién soy, cómo soy y cómo lo puedo hacer. Quizás sea eso.
Dónde conseguir “Todo por amor, pero no tanto” de Luis Novaresio
La novela “Todo por amor, pero no tanto” de Luis Novaresio, editada por Sudamericana en su colección de Narrativa, se puede adquirir en las distintas librerías del país y a través del sitio www.penguinlibros.com.