La familia de Bruce Willis, incluidas sus hijas y su exesposa Demi Moore, reaccionó con indignación y firmeza ante un comentario ofensivo sobre el actor, quien sufre de demencia frontotemporal.
El episodio se desarrolló en las redes sociales, donde quedó expuesto el despreciable comentario, desencadenando respuestas contundentes por parte de sus seres queridos.
El incidente comenzó cuando Tallulah Willis, una de las hijas de Bruce Willis, publicó una nota sobre su perrita chihuahua, Pilaf, en su perfil de Instagram.
Fue entonces cuando un seguidor dejó un comentario hiriente que decía: “Su cerebro está más aplastado que el de Bruce”. Este comentario, claramente ofensivo, no pasó desapercibido.
Tallulah no tardó en responder de manera directa y sarcástica: “Oh, Dios mío. Brutal, flaco”. Luego, amplió su respuesta en la misma publicación: “Poniendo en evidencia a este imbécil. Internet puede ser un lugar duro para sus Pilafs. Mantengan a salvo a sus bebés”.
El apoyo de Scout Willis y Demi Moore
Scout Willis, otra de las hijas de Bruce, también intervino con una respuesta contundente: “Si sus cerebros están aplastados, yo no quiero tenerlo sólido”, subrayando la absurda crueldad del comentario original.
Por su parte, Demi Moore, exesposa de Bruce y madre de Tallulah y Scout, elogió a la perrita Pilaf y defendió a su familia con una declaración emotiva: “Pilaf es una pequeña reina, increíblemente inteligente y un verdadero regalo, no solo para nuestra familia, sino para todos los que la conocen. Nadie puede decir o hacer nada que pueda apagar su brillante luz”.
El estado de salud de Bruce Willis
La salud de Bruce Willis se ha deteriorado notablemente desde que se le diagnosticó demencia frontotemporal en febrero de 2023. Esta condición ha afectado severamente sus habilidades lingüísticas y su capacidad de comunicación.
Glenn Gordon Caron, creador de la serie “Luz de Luna” y amigo cercano de Willis, describió en una reciente entrevista la difícil situación del actor: “Mi sensación es que entre uno y tres minutos sabe quién soy. Él ya no es totalmente verbal. Solía ser un lector voraz y ahora no lee. Todas esas habilidades lingüísticas ya no las tiene disponibles. Sin embargo, sigue siendo Bruce. Cuando estás con él, sabés que es Bruce y estás agradecido de que esté allí, pero la alegría de vivir se le fue”.