El pasado domingo 11 de enero de 2024 se llevó a cabo en Estados Unidos el evento deportivo Super Bowl LVIII, el partido final del campeonato de fútbol americano de la NFL. El juego, que se desarrolló en el Allegiant Stadium de Paradise de Nevada, enfrentó a los Kansas City Chiefs y los San Francisco 49ers, siendo victoria de los primeros por 25-22.
Así el equipo donde juega Travis Kelce, novio de la cantante Taylor Swift, revalidó el título de la NFL en Las Vegas.
Siendo el equipo favorito, la artista no podía perderse lo que era un momento importante para su pareja, por lo que, en tiempo récord, logró llegar a Estados Unidos y apoyarlo.
Tras una larga travesía de Tokio (cantó ahí el sábado), Taylor Swift se volvió viral y no por su presencia, su atuendo – el cuál de paso fue magnifico- o por haber dado un show, si no por una actitud poco habitual en ella.
Ocurre que la cantante llamó la atención por su preocupante manera de beber en medio de los nervios por el marcador 10-3 en contra del equipo de Kelce. Fue así que cuando la cámara del estadio la enfocó, ella sin saberlo decidió agarrar su vaso de cerveza y vaciarlo de un solo trago.
Posteriormente, el video fue viralizado en las redes sociales y fue tendencia al tratarse de la estrella pop, que recibió decenas de críticas, además de llevarse el protagonismo de las más de 80 mil personas presentes en el recinto.
Algunos internautas hicieron referencia a la situación y comentaron: “Incluso las celebridades con mucho dinero necesitan alcohol para divertirse” y “Bueno, ¡seguro que puede beber cerveza! ¡Aún más amor ahora!”.
También hubo quienes criticaron el acto al tratarse de algo indebido en un evento televisado: “Mi hija estaba mirando y ahora no puede dejar de llorar. Taylor era su ídolo”, escribió una usuaria en X.