Los últimos meses de Tini Stoessel no han sido para nada fáciles y lo dejó bien en claro con su último disco. Tras varias presentaciones en el Club de Hurlingham, la cantante se mostró en terapia con el famoso psicólogo Gabriel Rolón y contó todo.
Como escritor o como psicoanalista, Gabriel Rolón es de los más reconocidos del país y por eso Tini lo eligió para este momento tan particular. Aunque no se trató de una terapia formal, la cantante abrió su corazón y contó todo lo sucedido en una charla con el profesional.
Pasó desde el conflicto con su salud mental, la ansiedad cada vez que subía al escenario y el peor momento de salud de su padre Alejandro. “Un mechón de pelo” no pasó desapercibido para nadie y el mismo terapista le comentó: “Hay tanto de vos puesto en cada uno de esos versos y de esas estrofas... ¿Tiene algo de esto este álbum?”.
“Este disco tiene todas las emociones de lo que sería un duelo. Por eso elegimos empezar a contar esta historia con ese shock tan grande que fue lo que le pasó a mi papá”, fue la respuesta de Martina al comienzo de la charla.
Sin dejar de lado este tema, también entendió que se trató de una bolsa de problemas que se dieron casi al mismo tiempo: “Lo de mi papá fue la gota que rebalsó un vaso lleno de agua. Me encontré en lugares oscuros, no sabía qué nombre ponerle”.
Tini Stoessel y su duro presente en cuanto a su salud mental
Lejos de no tener fuerzas físicas, notó la falta de ganas que tenía cada día cuando debía levantarse de su cama. Teniendo en cuenta esto, entendó que no sabía como manejar sus emociones: “Lo que mi cabeza me decía, lo que se había creído, era: ‘Fuiste a un colegio bilingüe. Nunca te faltó un plato de comida. ¿Cómo vas a estar mal? ¿Cómo te lo vas a permitir?’”.
Sobre esto, declaró que le costó quitarse las etiquetas que ella nunca se puso pero si se creyó con el tiempo. “Me costó amigarme conmigo misma, permitirme estar mal, levantar el teléfono y decir: ‘Esto no lo puedo hacer, esto se suspende porque no estoy bien’”, expresó.