“Sigue firme, nunca falla. Es un bandoneón que no se fabrica más y mientras siga funcionando me seguirá acompañando”, cuenta Fabrizio Colombo sobre el instrumento que heredó de su abuelo Francisco, histórico músico mendocino que junto a su Orquesta Típica escribió un capítulo importante del tango en nuestra provincia.
Y con la misma pasión y ganas, con el bandoneón entre sus manos, más allá de la herencia recibida, Fabrizio desde muy joven viene forjando un camino necesario en el género, con múltiples proyectos, en los que despunta su talento compositivo e interpretativo.
El miércoles pasado, después de años de intenso trabajo, Fabrizio Colombo 7teto lanzó su primer disco de larga duración: “Celedonio”. Una recopilación de nueve temas arreglados por el propio Colombo, cuya estética nace de la tradición tanguera, para luego abrazar fuertemente una mixtura entre el jazz, la música clásica e influencias musicales contemporáneas.
Un disco necesario para el tango actual
Como grupo mendocino que abraza la música rioplatense, el sexteto plantea una propuesta fresca, que renueva el clásico sonido, pero sintetiza también una búsqueda propia.
“De cierta manera es sumar propuestas novedosas e incursionar en el tango, desde una riqueza en lo sonoro y lo interpretativo. Eso escasea y en Mendoza el tango ha perdido un poco de valor, ha perdido estímulo. Y esta propuesta viene a reunir un poco eso, todos los músicos que integran el grupo tocan tango. Cada arreglo tiene mucho tiempo de trabajo”, comenta Fabrizio Colombo, bandoneonista, director y compositor del grupo.
Lo completan Bruno Cavallaro en primer violín, Lucas Altamore en segundo violín, Matías Longo en cello, Enzo Paolo Rossi en contrabajo, Joaquín Guevara en guitarra y Mariano Colombo en piano: todos músicos que indagan en el género con pasión y con la firmeza de que hay que seguir cultivando el sonido rioplatense.
Piezas de Astor Piazzolla como “Milonga del ángel”, el clásico “El día que me quieras” de Carlos Gardel, “Danzarín” de Julián Plaza, una adaptación de “Cumbia” de Edgardo Cardozo, y el tema que le da nombre al disco “Celedonio¨, compuesto por Colombo, son parte del compilado de nueva canciones, disponible en las plataformas digitales bajo el sello independiente Shagrada Medra, creado por Carlos “el Negro” Aguirre y Luis Barbiero.
“Los arreglos tienen mucha influencia con otras sonoridades, la armonía propone algunos cambios, sonidos más modernos que viajan a otros estilos, pero nunca deja de sonar el tango. Esa es la identidad que busco: desde el tango sumar un sonido. Los arreglos me pueden llevar meses o semanas, depende cómo se dé, el grado de complejidad. El disco es el resultado de todos estos años, de hacer un camino, donde siempre primó el crecimiento y las ganas de hacer algo distinto”, sintetiza el bandoneonista sobre el álbum, cuyo título nace de su gato Celedonio, que lo acompañó en todo el proceso y al que le compuso esa pieza.
El arte de tapa fue elaborado en óleo sobre lienzo por Juan Ignacio Sagristá y el diseño gráfico y el arte de disco los realizó Germán Quiroga.
-¿Qué devolución tuviste sobre el disco y tu trabajo compositivo?
-Nos escucharon en otros escenarios, como en Buenos Aires, y nos felicitaron por la propuesta. Porque a veces no se espera que un grupo del interior suene bien. En esa ocasión nos escucharon colegas y nos han dado una buena devolución, felicitándome por los arreglos.
-El sexteto reúne jóvenes músicos de Mendoza que tienen su camino en el tango, ¿qué los une como grupo para alimentar el género desde la provincia?
-El grupo está conformado por músicos que tienen un camino en la música y tenemos un respeto mutuo por el trabajo que hacemos. Y eso logra que funcionemos como grupo y suene como realmente buscamos. Además es un gusto poder tocar entre nosotros. Y es necesario que existan proyectos donde prime la música y el arte, más allá de la necesidad laboral. Con el sexteto busco generar una propuesta distinta y poder disfrutarla.
Para ir apuntando
“Celedonio” será presentado oficialmente en vivo el próximo viernes 23 de septiembre, a las 22, en Beat Club (Perú 1773, Ciudad).