El tenor italiano Andrea Bocelli lanzó el viernes su nuevo disco, “Believe”, que incluye las participaciones de la vocalista de bluegrass Alison Krauss y de la famosa mezzosoprano Cecilia Bartoli. La producción y grabación de este álbum estuvo enmarcada y motivada “por el dolor que nos rodeaba” durante la pandemia de coronavirus.
Con Italia seriamente afectada por la Covid-19, Bocelli ofreció una actuación, “Music for Hope”, en Semana Santa, desde el Duomo de Milán, que fue vista en vivo por millones de personas en todo el mundo.
Bocelli, nacido en el pueblo toscano de Lajatico, es un hombre muy religioso. Por eso percibió de inmediato que “el espíritu” iba a ser clave para resistir el virus y darle ánimo a la población ya no solo italiana, sino de todo el mundo: “Pido fe y esperanza, el único antídoto para eliminar el virus”, había dicho en abril, en referencia a ese virus que él mismo también contrajo.
Por eso, indicó a Télam que este nuevo trabajo “es una llamada al espíritu, a la meditación, a la reflexión sobre el sentido de la vida, sobre el don de la vida”.
“El concepto detrás de ‘Believe’ se basa en tres palabras: fe, esperanza y caridad. Estas son las tres virtudes teologales del cristianismo, pero, independientemente de cualquier creencia religiosa, también son las tres claves extraordinarias para dar sentido y plenitud a la vida de cada uno de nosotros”, añadió.
Durante el proceso de elaboración de esta placa, Bocelli contrajo coronavirus y luego de recuperarse acudió al hospital público de Pisa a donar plasma. Tanto él como su esposa y sus dos hijos habían dado positivo en un test pero apenas padecieron “unas líneas de fiebre”.
Tras la donación realizada junto a su esposa, Veronica Berti, el hospital Cisanello de Pisa emitió un comunicado en el que agradeció el aporte del cantante para un experimento local que analiza la eficacia del plasma inmune de pacientes que sufrieron coronavirus en un eventual tratamiento en su contra.
Bocelli participó de distintas cruzadas para recaudar fondos en medio de la pandemia, como su presentación en el concierto “One World: Together at Home”, organizado por la Organización Mundial de la Salud y Lady Gaga; o su concierto en Pascua en la Catedral de Milán.
Para “Believe”, Bocelli buscó canciones edificantes como “Amazing Grace”, un himno religioso y épico para los cristianos anglosajones; así como “You’ll Never Walk Alone”, la canción que Richard Rodgers y Oscar Hammerstein escribieron para el musical “Carousel”, estrenado en el año 1945.
Los hinchas del Liverpool inglés han convertido esta canción en una pieza de épica y heroísmo y la usan para levantarle el ánimo a sus jugadores en las instancias finales de la Champions League.
Para “Amazing Grace” se buscó como coequiper a Alison Krauss, una de las voces más importantes del bluegrass y el góspel en los Estados Unidos, ganadora de 27 premios Grammy y con un disco considerado una verdadera joya de la música de raíces: “Raising Sand” de 2007 y a dúo con Robert Plant, líder de Led Zeppelin.
También incluye dos duetos con Bartoli, con quien interpretó “I Believe” y “Pianissimo”, una canción escrita por Mauro Malavasi, que lleva casi 30 años trabajando con Bocelli, compuesta en un estilo minimalista y elegante inspirada por Erik Satie.