Julie Delpy es, para quienes amamos el cine, un sinónimo de deliciosos planteos profundos que vienen con los aires franceses impregnados en sus modos. Prueba de ello son “Blanc” de Krzysztof Kieslowski o la trilogía de Richard Linklater: “Antes el amanecer”, “Antes del atardecer”, “Antes de la medianoche”.
Elisabeth Shue, de este lado del Atlántico, promete un ideario artístico igual de exquisito pero con innegable acento estadounidense. También es rubia, también es una actriz estupenda, y también tiene créditos para afirmarlo: “Adiós a Las Vegas” de Mike Figgis o “Los secretos de Harry” de Woody Allen; bastan, entre otro montón de películas.
Pero en los territorios de la creación audiovisual, la suma de Delpy más Shue no necesariamente dará como resultado una dorada y logradísima obra. Y la serie “Al borde”, escrita y dirigida por la francesa y producida por la estadounidense, es otro apunte para esta nueva hipótesis.
“Al borde” es una comedia que acaba de presentar Netflix, y que se estrenó suponiendo el éxito que traerían estas asociaciones: la escritura de la actriz que supo ponerle palabras a ese peliculón que fue “Antes del atardecer” y un tándem de cuatro intérpretes bien diversas para darle cuerpo a cuatro mujeres con distintas historias pero un mismo problema: la crisis de la mediana edad: Julie Delpy, Sarah Jones, Elisabeth Shue y Alexia Landeau (coguionista junto a Delpy).
La trama es simple: una chef francesa afincada en Estados Unidos (Delpy), una madre soltera y diseñadora de modas casi siempre drogada (Shue), una heredera neurótica de libro y bien casada (Jones) y una desempleada que no encuentra cómo llevar el pan a casa (Landeau) intentan recuperar aquello que fueron perdiendo en el camino entre la juventud y la madurez.
Pero “Al borde” navega entre dos aguas narrativas que son muy difíciles de congeniar: la comedia francesa que se vale de los diálogos ingeniosos y la profundidad psicológica para gestar el humor y delinear sus personajes. Y la estadounidense, con el mismo objetivo, que apela a los gags -en la nueva comedia, cuanto más groseros, mejor- y el efecto visual. En “Al borde” la intentona de Delpy y Landeaux guionistas es la de cruzar estos mares bastante incompatibles. Y lo que decanta de esta idea es un producto a medio camino que deja a la intemperie a sus creaciones.
Este tropiezo de base tiñe a los personajes y conspira con la posibilidad de que las actrices puedan desarrollar interpretaciones sólidas. Y también con la credibilidad de algunas situaciones en las que los personajes varones lucen casi innecesarios.
Para zambullirse en “Al borde” es preciso abandonar la idea de lo excelso que podrían haber sido estas actrices mancomunadas en un guión de las sutilezas de “Antes del atardecer”. Hay que saber que es un producto más, entretenido, con algunas escenas divinas, otras muy divertidas; pero no que de ahí no pasa.
La ficha
Al borde (”On the verge”, 2021, EE. UU.). Género: comedia de tv. Dirección: Julie Delpy, Mathieu Demy, David Petrarca. Guion: Julie Delpy y Alexia Landeau. Fotografía: Nicole Hirsch Whitaker. Con: Julie Delpy, Sarah Jones, Elisabeth Shue, Alexia Landeau, Daphne Albert, Timm Sharp, Christopher Convery, Mathieu Demy. Disponible en: Netflix. Nuestra calificación: Buena.