A menos de dos meses de su estreno, período que le alcanzó para convertirse en la película más taquillera del año, Matt Reeves, director de “The Batman”, la nueva entrega del famoso superhéroe protagonizada por Robert Pattinson, confirmó que habrá una segunda parte.
Así lo reveló el martes en la CinemaCon, la feria comercial anual para propietarios de cine que se realiza en Las Vegas, en donde anticipó que él mismo estará a cargo del guion, aunque no brindó más precisiones, según informa el sitio Variety.
A pesar de su duración de tres horas y del perfil más detectivesco que tiene el personaje, lo cual supone una merma en las tradicionales escenas de acción en este tipo de películas, “Batman” se convirtió en un suceso con sus 759 millones de dólares recaudados a nivel mundial, la cifra más alta entre todos los estrenos de este año.
Entre otros logros comerciales, la película también fue la segunda, junto a “Spider-Man: Sin camino a casa” en superar la barrera de los 100 millones de dólares en un fin de semana desde el inicio de la pandemia.
Además del exactor de la saga “Crepúsculo” en el rol del “encapuchado”, el filme cuenta con Zoë Kravitz como Gatúbela, Andy Serkis como el fiel mayordomo Alfred, Colin Farrell como El Pingüino y Jeffrey Wright como el jefe de policía Gordon.
El actor revelación de Eternals y Batman, Barry Keoghan, fue arrestado en Irlanda
Barry Keoghan ha dado más impresiones de las que imaginábamos, tanto buenas como malas. El actor ha estado en boca de todos después de sus destacadas y brillantes actuaciones en el mundo de los superhéroes, primero en Eternals, la cinta de Marvel Studios, y luego como Joker en The Batman, la nueva cinta protagonizada por Robert Pattinson.
Las acciones del actor han estado dando qué hablar. En las últimas horas se conoció que Barry fue el protagonista de un incómodo momento en Irlanda y fue arrestado.
Vecinos de un edificio de la ciudad de Dublín llamaron el pasado 10 de abril a la policía para denunciar a un hombre que estaba presuntamente ebrio en su balcón.
Según se supo a partir de los informes elaborados en el lugar, no hubo ningún tipo de enfrentamiento y, pocas horas después, Barry Keoghan fue puesto en libertad tras abonar multa por su comportamiento.