Hay actores y actrices de Hollywood que no solo construyeron su estelaridad en base a su carisma, talento y transformaciones, sino también por darle un cuidado especial a las películas que conforman su IMDb. Sin embargo, a veces el instinto puede fallar… O la billetera pesa más en la decisión final.
Algunos ni leyeron los guiones, otros querían invertir millones en una nueva mansión (o saldar el divorcio) y el resto buscaba explorar nuevos “desafíos”.
En la siguiente lista, repasamos diez películas horribles que tuvieron a grandes protagonistas. No esperen encontrar los últimos 20 años de Bruce Willis o Kevin Costner ni tampoco placeres culposos (“Batman y Robin”). A esta altura son, como mínimo, inimputables.
1. “Tiburón, la venganza” (Jaws: The Revenge, 1987)
Hubo una época en la que los de Universal explotaron secuelas deformes de la obra maestra de Steven Spielberg. Y como ya no sabían cómo venderla, a la última le quitaron el “4″ del título. Lo divertido no es tanto el pésimo resultado o la inmortalización de la frase “¡esta vez es personal!”, sino más bien la participación de Michael Caine.
El actor británico se ausentó a la entrega de su primer premio Óscar por su actuación en “Hannah y sus hermanas” (Hannah and Her Sisters, 1986), de Woody Allen, porque tenía que grabar “Tiburón 4″ en Bahamas. La justificación de Caine es para aplaudirlo de pie.
“La película (Tiburón 4) quedará en mi memoria como el momento en que gané un Óscar, pagué una casa y pasé unas vacaciones fantásticas. Nada mal para un fracaso”, declaró el intérprete en su autobiografía de 1992 titulada “What’s it All About”.
2. “Tiptoes” (2003)
Diez años antes de Guillermo Francella, a un productor de Hollywood se le ocurrió convertir en enano a Gary Oldman y publicitarlo como “the role of a lifetime”.
En una de sus olvidables comedias de los 2000, Matthew McConaughey interpreta a un galán hegemónico aterrado por si su bebé hereda el “gen” de enanismo de su familia. Y si la cosa no es lo suficientemente incómoda, su esposa (Kate Beckinsale) se enamora del hermano (Oldman). En la película también asoman Patricia Arquette y Peter Dinklage.
Sí, el tráiler de “Tiptoes” parece extraído de “Una guerra de película” (Tropic Thunder, 2008).
3. “Proyecto 43″ (Movie 43, 2013)
El productor Charles B. Wessler, famoso por sus colaboraciones con los hermanos Farrelly, tuvo la idea de montar una comedia escatológica compuesta por varios segmentos. Le demandó cuatro años juntar a 13 directores (entre ellos James Gunn y Elizabeth Banks) y una veintena de inmensas estrellas como Hugh Jackman, Halle Berry, Uma Thurman, Kate Winslet, Julianne Moore, Richard Gere, Emma Stone y Jason Sudeikis.
Peter Farrelly, director de uno de los cortos, fue el único honesto al respecto: “Niños, adolescentes, personas de 50 y tantos que todavía fuman marihuana, todos encuentran algo aquí”.
4. “La isla del doctor Moreau” (The Island of Dr. Moreau, 1996)
Más recordada por su turbulenta producción que nada tiene que envidiarle a “Apocalypse Now” (1979), la película de ¡John Frankenheimer! reunió en pantalla a Marlon Brando, Val Kilmer, David Thewlis, Ron Perlman y hasta Nelson de la Rosa, cuyo papel inspiró después al Mini-Me de “Austin Powers”.
Originalmente, Richard Stanley pasó cuatro años diagramando el guion hasta que New Line Cinema le ofreció la dirección a Roman Polanski. Esto no le cayó nada bien al sudafricano, quien le pidió a Brando, ya contratado para estelarizar el filme, que presionara a la producción para convertirlo en director.
Con su capricho obtenido, Stanley convenció a Bruce Willis, pero al rato el actor se bajó por los problemas maritales de entonces con Demi Moore. Entró como reemplazo Val Kilmer. Se peleó con medio elenco, se encerró en su camarín con aire acondicionado mientras los demás se asaban con el maquillaje en Australia y atravesó una demanda de divorcio en el medio.
Incapaz de controlar el rodaje, Stanley fue echado. Ya de capa caída en los 90, el veterano Frankenheimer aceptó la propuesta porque quería trabajar con el legendario Brando... a cambio de padecer a Kilmer. Tantas tensiones terminaron en una película errática, ni siquiera lo suficientemente bizarra para ser entretenida. Igualmente, la escena de Brando y Nelson de la Rosa en el piano enternece a cualquiera.
Para el escándalo completo, hay dos documentales recomendados para disfrutar: “Lost Soul: The Doomed Journey of Richard Stanley’s Island of Dr. Moreau” (2014) y “Val” (2021), original de Amazon Prime Video.
5. “Garfield” (2004)
Bill Murray le puso voz al gato animado por computadora en las dos películas live-action de mediados de los 2000. No sabemos si creerle, pero él dice que alcanzó a leer el nombre de cierto guionista y firmó de inmediato, pero no era justamente el de “El gran Lebowski” (The Big Lebowski, 1998).
“Realmente no había leído el guion. Yo dije: ‘Me encantaría hacer una de estas películas animadas. Son bastante divertidas’. Bueno, no era ese Joel Coen, era otro Joel Cohen”, contó Murray. Convengamos que tampoco pareció importarle, ya que el actor aceptó estar en la secuela.
6. “Super Mario Bros.” (1993)
Fue tan mala la película basada en la franquicia insignia de Nintendo que aún hoy inspira la racha negativa de las adaptaciones de videojuegos.
Bob Hoskins terminó en el rol de Mario después de que Dustin Hoffman y Danny DeVito quedaran afuera del proyecto. En tanto, John Leguizamo rechazó la laureada “Filadelfia” (Philadelphia, 1993) y quiso darle vida al fallido Luigi sin bigote. Pero lo más excéntrico es ver aquí a Dennis Hopper, la mente y cuerpo detrás de “Easy Rider” (1969), como el villano.
La anécdota de Hopper es maravillosa: “Mi hijo de seis años en ese momento dijo: ‘Papá, creo que eres un actor bastante bueno, ¿por qué interpretaste a ese terrible King Koopa en Super Mario Bros.?’. Le contesté: ‘Bueno, Henry, lo hice para que pudieras tener zapatos’, y él dijo: ‘Papá, no necesito tanto los zapatos’”.
7. “La gran boda” (The Big Wedding, 2013)
No era la mejor época para el querido Robin Williams, quien encarnó a un cura en esta comedia extraída de otro tiempo. ¿Qué les ofrecieron a Diane Keaton, Robert de Niro, Amanda Seyfried, Susan Sarandon y Ben Barnes para aceptar este bodrio de un inexperto como Justin Zackham? Todavía es un misterio.
8. “Cats” (2019)
Ni siquiera el diseño de arte, las canciones o los efectos visuales salvaron a este reducto en el que cayeron Judi Dench, Idris Elba, Ian McKellen y Rebel Wilson, entre otros. Hasta Taylor Swift, Jason Derulo y James Corden se coparon con la idea sin prurito alguno. Que Tom Hooper mejor siga aprovechándose de la sensiblería de la Academia como en sus anteriores dramas.
9. “Highlander II: The Quickening” (1991)
En 1990, Sean Connery y Christopher Lambert viajaron a Buenos Aires para grabar “la película más grande que se haya filmado jamás en Latinoamérica”, como aseguró el productor Bill Panzer. Fiasco económico y artístico.
Es que la producción de los inmortales llegó a costar 30 millones de dólares pero, con la hiperinflación de por medio, hubo recortes y la batuta creativa pasó a manos de los inversores.
Quienes quieran revisitar el filme, hay una secuencia demencial con el malvado Katana (Michael Ironside) a bordo de un subte en la estación Medalla Milagrosa de la línea E, aparece el mercado del Abasto antes de mutar a shopping, el Valle de la Luna de San Juan es el planeta Zeist y es posible reconocer a Michael Peyronel, el músico de Riff, en un bolo.
10. “Jack y Jill” (2011)
Infaltable en la lista. Hay una escena donde, tras un comercial de Dunkin’ Donuts, Al Pacino le dice a Adam Sandler: “Quemen esto, nadie va a verlo, destruyan todas las copias”.