¿Cuántas probabilidades hay de que una persona pierda la memoria pero tenga todos sus recuerdos en un archivo viviente? Es una pregunta bastante difícil de responder. Si además la persona pudiera incorporar solo los buenos recuerdos y descartar los malos, parece más una película de ciencia ficción que una historia real. Sin embargo la ultra trillada frase “la realidad supera la ficción” es perfectamente aplicable en este caso.
Tell me who I am, (Dime quien soy) cuenta la historia de dos hermanos gemelos, Alex y Marcus Lewin. Cuando tenían 18 años, Alex tuvo un accidente en moto y debido a los golpes recibidos, sufrió amnesia permanente, es decir que todos sus recuerdos fueron eliminados de su memoria para siempre. Su hermano Marcus, le ayudó a reconstruir fragmentos de recuerdos. Y aquí es donde comienza lo perturbador de la historia.
Este documental, del director y productor británico Ed Perkins, fue estrenado en 2019 en Netflix y se puede contar como una de las tantas joyitas perdidas de la plataforma.
Pocas historias tan llenas de sorpresas, de misterio, de amor y de incomprensión como la de estos hermanos, en la que uno queda a merced del otro, entregando su absoluta confianza.
Cuando Alex despierta en el hospital, aquella mañana trágica luego del accidente, ve a dos personas junto a él en la habitación: uno es su hermano Marcus, a quien reconoce de inmediato; la otra es una mujer desesperada que le pregunta insistentemente “¿sabes quién soy?”. Era su madre. Alex no la reconoce y no lo haría jamás, aunque con el tiempo aprende a conocerla, al igual que a su padre, su casa, sus amigos, su infancia y su vida. “Ni siquiera sabía qué era Inglaterra”, cuenta su hermano, Marcus.
Así, Alex comienza a aprender todo de nuevo, desde bañarse, hasta utilizar los cubiertos. Aunque todos estos datos son apenas mencionados en el documental -que va directamente a lo importante, y que no mencionaremos en esta nota para no spoilear el contenido central-, dan una idea aproximada de lo que pueden haber sido aquellos días para los hermanos.
De la misma forma, comienza a hacer preguntas acerca de la vida que había tenido, a lo que Marcus responde contándole historias acerca de la familia, su infancia y sus amigos.
El documental tiene tres momentos: en el primero, Alex cuenta cómo fue su vida desde que despertó esa mañana en el hospital y cómo poco a poco fue empezando a incorporar recuerdos a partir de fotos y filmaciones.
La segunda parte trata acerca de los mismos hechos pero desde la experiencia de su gemelo, Marcus. Lo interesante, lo intenso, es que no hace falta que sea muy explícito para entender a través de su mirada que las cosas no eran tal como él se las narró al hermano.
En la tercera y última parte, se devela una desgarradora historia de la que uno de los dos tenía plena consciencia de la verdad, mientras que el otro era absolutamente ajeno, debido a la amnesia.
A los 32 años, luego de la muerte de la madre, Alex comprende la magnitud de los hechos que acontecieron en su vida y de los que no tenía recuerdos. Recién 22 años después de aquel momento, (cuando tenían 54) y gracias a la realización de ese documental, los hermanos pudieron reencontrarse y hablar personalmente de aquellos años.
Sin dudas un documental extraordinario, de una historia fuera de lo común, en la que el amor infinito de dos hermanos puede llevarlos a cometer un grave error -o no- al intentar liberar al otro de la insostenible carga de la culpa. En su lanzamiento, recibió elogios de la crítica y fue descrito como “desgarrador” y “envolvente pero perturbador”.
Dime quién soy. 2019. Estados Unidos. Dirigida por: Greg Daniels y Jeffrey Blitz. Protagonizada por: Alex y Marcus Lewis. Género: Documental. Disponible en Netflix. Nuestra opinión: Excelente