Desde que en “Spider-man: Sin camino a casa” se abrió el portal interdimensional de los multiversos, y corrieron los gritos de los fans por los cines del mundo, los ejecutivos se dieron cuenta de lo que era muy evidente: ahora la factoría parece abrirse a un infinito de posibilidades.
Pero el infinito de lo posible tiene la limitación de lo soportable. El concepto de universos paralelos “comienza a parecer una muletilla de la franquicia”, dijo The Hollywood Reporter. Pero lo cierto es que mientras el multiverso llame la atención, las películas irán por ahí.
“Creo que ‘Doctor Strange 2′ llega en un momento ideal porque todo el mundo está hablando sobre lo maravilloso que es el concepto del multiverso, no está desgastado”, opinó hace pocos días Jeff Bock, analista de Exhibitor Relations.
“Doctor Strange en el multiverso de la locura”, que estrena hoy oficialmente después del usual pre-estreno masivo de ayer, tensa las cuerdas argumentales al límite. Si el público aprueba esta entrega, para la que se auguran recaudaciones que podrían acercarla a la última del superhéroe arácnido (la tercera más taquillera en toda la historia de Estados Unidos), es esperable que engendre una nueva generación de películas-multiverso.
Y está casi cantado que lo hará. “Doctor Strange 2″ no solo tiene los cameos que harán poner la piel de gallina a los que siguen con esmero los 27 taquillazos y sus series derivadas en Disney Plus, sino que los más avezados descubrirán en ella historias que se desplegarán en futuras películas y series.
Doctor Strange (Benedict Cumberbatch) es algo así como un personaje que articula, baraja y reparte argumentos posibles. “Estamos abriendo una caja. Y habrá muchas más oportunidades narrativas de aquí en adelante”, opinó recientemente Elizabeth Olsen (Wanda). Y Kevin Feige, el influyente presidente de Marvel Studios, ya dijo que la próxima década de películas y series ya está pensada e incluso “avanzada”.
El caso de “Doctor Strange 2″ es quizás paradigmático porque se permite llevar el concepto a su propio límite y probar de ese modo también el límite del gran público de Marvel. En esta entrega el mago abre un portal al multiverso al utilizar un hechizo prohibido, y “con la ayuda de viejos y nuevos aliados místicos, atravesará las alucinantes y peligrosas realidades alternativas del multiverso para enfrentarse a un nuevo y misterioso adversario”.
¿Quién es la némesis de Doctor Strange? Esa es una de las incógnitas que serán blanco del spoiler en las redes sociales desde hoy. Por lo demás, la sensación de montaña rusa que da esta película es algo que no puede boicotearse con un meme. Ni tampoco el placer de reconocer minuto a minuto los guiños marvelísticos, que se dan en todas partes.
El engranaje más obvio es el que se da entre esta película y “Spider-man: Sin camino a casa” (donde Doctor Strange muestra sus poderes mágicos trayendo a tres hombre arañas distintos) y “WandaVision”, de donde “viene” casi directamente Elizabeth Olsen. Pero también hay citas a otras películas de la saga, a la serie “Loki” y, quienes conozcan de cerca la filmografía de Sam Raimi, captarán las intertextualidades con su propias películas anteriores, lo que ha llevado a que muchos la definieran como la película más “de autor” de Marvel.
La idea abismal de pasearse por distintos universos era atemorizante y los productores confiaron en que Raimi haría un buen trabajo. No solo porque ya tenía el antecedente de la primera trilogía de Spider-man, que él dirigió con un espíritu mucho más “adulto” que las últimas (en donde ningún diálogo se completa sin un chiste). Sino también porque Sam Raimi es un maestro del cine de terror: recordemos su clásico “The Evil Dead” (1981).
No sin razón algunas reseñas dicen que es un filme “terrorífico” o “grotesco”, aunque -se sobreentiende - en un grado Apto Para Todo Público. La han calificado de ser la película “más extraña y asquerosa” de Marvel, y también de “deliciosamente estúpida”. Con esas críticas, es difícil resistirse a verla.
Qué ha dicho la crítica
-Jena Anderson (Comic Book): “Es alucinante. Es imaginativa, verdaderamente extraña y absolutamente divertida de ver. No me di cuenta de cuánto necesitaba el UCM algo como esto”.
-Germain Lussier (Gizmodo): “Es la película más extraña y asquerosa de Marvel Studios hasta la fecha. Se siente tremenda e inconexa, en parte a propósito, por lo que no siempre funciona. Pero el horror y especialmente Wanda Maximoff funcionan increíblemente bien. Además… Guau. Hay grandísimas sorpresas”.
-Kevin Polowy (Yahoo Entertainment): “Es absolutamente de locos. Una auténtica locura. Los fans incondicionales se van a molestar. Los más casuales dirán ‘wtf qué estoy viendo’. Pero nadie podrá negar que es Sam Raimi en todo su esplendor. Elizabeth Olsen se lleva la película de principio a fin”.
-Siddhant Adlakha (The New York Times): “Es deliciosamente estúpida. Una agradable sorpresa: las mejores y más divertidas partes de la película son todas, definitivamente, de Sam Raimi”.
