Uno pensaría que de los errores de los demás se aprende, pero siempre la respuesta puede sorprendernos. Después del revuelo que ocurrió con El juego del calamar, donde el número telefónico que aparecía en la serie debió ser quitado ya que pertenecía a una línea real de una mujer coreana, ahora otra exitosa cinta de Netflix repite la escena.
Fue en Don’t Look Up, la nueva película de Leonardo DiCaprio y Jennifer Lawrence que ha ganado gran protagonismo en la plataforma, en donde un número telefónico que aparece fue registrado por más de un usuario.
Y es que es un elemento al alcance de la mano de cualquiera, por lo que aquellos navegadores de redes sociales no pudieron evitar saber qué les deparaba del otro lado de la línea.
Sin embargo, aquel teléfono que el personaje de DiCaprio ofrece para que la gente pueda calmarse, se trató de algo impensado por los mismos actores, productores y hasta espectadores.
Algunos usuarios de Twitter descubrieron que un número de teléfono que aparece en el marco de un corte publicitario de la comedia de ciencia ficción de Netflix es nada más ni nada menos que una línea de sexo telefónico.
¿De qué escena se trata?
El número aparece cuando el doctor Randall Mindy, interpretado por DiCaprio, protagoniza un anuncio de servicio público y ofrece el número de teléfono 1-800-532-4500 para que la gente pueda sentirse tranquila ante la aproximación de un cometa destructor de planetas.
“Elogios a ‘No mires arriba’ por tener la línea directa de BASH (compañía tecnológica en el filme) para su línea directa de prevención del estrés por asteroides que está vinculado a un número de teléfono de ‘Hot Singles’ en su área”, escribió un usuario.
“He visto ‘No mires arriba’ esta noche en Netflix. Me encantó. En un momento, un número de teléfono parpadeó en la pantalla, decidí llamar y era una línea de chat de sexo. 1-800-532-4500. ¡Eso sí que es divertido!”, confirmó otro.
No se sabe si se trató de un descuido de la producción o fue algo completamente intencional. Lo que sí se sabe es que Don’t Look Up deja mucho que decir.