Lady Gaga sigue demostrando su talento como actriz en su nueva película, “House of Gucci”, que podría llevarla a ganar por primera vez el Oscar a Mejor Actriz, que ya se le escapó de las manos en “Nace una estrella”.
Patrizia Reggiani, el extravagante y maquiavélico personaje que interpreta ahora, es decididamente diferente al que encarnara esa vez junto a Bradley Cooper. Aquí no hay candidez sino maldad pura. Quienes sepan algo de la historia de la familia Gucci, uno de los emporios de moda más prolíficos del mundo, sabrán de qué viene esta película: pero aquí no habrá spoilers.
Dirigida por un coloso del cine como Ridley Scott (quien en películas como “Gladiador” o “All the Money in the World” dio indicios de lo mucho que le interesa la cultura italiana), esta película se inspira en un libro homónimo de Sara Gay Forden. Allí se cuenta cómo una dinastía se deshace en su tercera generación en medio de oscuros secretos, asesinatos, paparazzis y mucho dinero en juego.
Scott invirtió bastante en actores, pues al lado de Lady Gaga, quien sirve de imán de la historia, gravitan una larga lista de famosos: Al Pacino, Jeremy Irons, Adam Driver, Jered Leto, Salma Hayek y hasta el propio Tom Ford, diseñador y director de cine, haciendo un cameo.
Todo se traduce, según la crítica, en algo cercano a la gloria. “[El filme] es exagerado. Los acentos. Las actuaciones. La moda. Los escenarios. El tiempo de ejecución. La música. La codicia. Esta película sabe exactamente lo que es y, cariño, es gloriosamente decadente y ridículamente divertida”, escribió la crítica de AP.
Irons y Al Pacino interpretan a los hijos de Guccio Gucci: Rodolfo y Aldo, respectivamente. El primero tiene un hijo, Maurizio (Driver), quien ve su destino más en las leyes que en el negocio familiar; por otro lado Paolo (Leto), el hijo de Aldo, es un sujeto ridículo con delirios de grandeza y sin talento.
A ese cóctel familiar ingresa Reggiani, con su carácter explosivo y su carisma capaz de enamorar a la gente y a la prensa. Armas, en definitiva, que usa para controlar el entorno y desencadenar después los sucesos sangrientos en los que concluye la película, que empieza tímidamente como una comedia romántica hasta volverse en algo oscuro y truculento. Un golpe de timón que Ridley Scott cumple con su usual destreza.
Pocos dudan de las dotes actorales de Lady Gaga y es muy probable que la Academia la ubique entre lo mejor del año cinematográfico, pese a que los italianos han tomado con cierto humor su frustrado intento de pulir un acento italiano inexistente.
Es que Stefani Germanotta nunca pierde oportunidad en decir públicamente que ella se considera italiana por sus orígenes, aunque no hable la lengua. La semana pasada, durante el periplo internacional de avant premieres que se hizo en ciudades como Nueva York, la diva del pop pasó por Italia y accedió a ser entrevistada por televisión: algo, por lo menos, atípico en una celebridad de su talla. En la visita al estudio de la RAI, que se viralizó por redes sociales, se emocionó hasta las lágrimas recordando su sorprendente carrera. Se sentía en familia.
Por otra parte, en un cambio de método interesante y distinto a otros actores, Lady Gaga se negó a conocer a la verdadera Patrizia Reggiani, quien salió por buena conducta de la cárcel en 2016.
En lugar de eso, decidió construir su propia viuda negra, obteniendo la fuerza de su propia sangre italiana y la rabia que contiene el personaje de sus propias experiencias vividas. “Todo el trauma que sentí por ser atacada por un hombre mayor cuando era chica [la cantante confesó que fue violada en su adolescencia], por sentirme atrapada con gente que me dejaba atrás, todo ese dolor se lo di a ella”, dijo.
¿El resultado? Basta verla en el trailer de la película, acaparando todas las miradas con su pelo negro volcánico, tapados, anteojos y zapatos. Confirma lo que ya sabemos: Lady Gaga tiene muchas buenas versiones de sí misma.
Más estrenos
Retrospectiva Clint Eastwood: los clásicos del legendario director y actor vuelven excepcionalmente a los cines del país. Una película por día desde hoy hasta el miércoles. Se recomienda visitar las páginas de las multisalas para conocer a qué día y horario corresponde cada título, entre los que se cuentan “Los puentes de Madison” y “Gran Torino”.
“Encanto”: Esta película de animación cuenta la historia de los Madrigal, una familia extraordinaria que vive escondida en las montañas de Colombia, en una casa mágica, en un pueblo vibrante, en un lugar maravilloso conocido como un Encanto. Mirabel, quien cree que no tiene ningún don especial, tendrá la oportunidad de salvar a su pueblo.
“Asalto a la casa de la moneda”: La leyenda de que el Banco de España es inexpugnable y no se puede robar no asusta a Thom Johnson, el brillante y joven ingeniero reclutado para averiguar cómo acceder a su interior. El objetivo es un pequeño tesoro que va a estar depositado en el banco solo diez días. Dirigida por Jaume Balagueró, con Freddie Highmore y Liam Cunningham.
“El nido”: Samuel es un joven parapléjico que vive con su madre Elena en Villa del Lago, una aislada residencia rodeada de bosques. Ellos se encuentran atrapados en una rutina familiar y con una estricta prohibición para salir de la casa. Samuel crece aparentemente sereno pero insatisfecho e inquieto. La llegada de una adolescente, Denise, romperá el balance familiar y finalmente le dará a Samuel la fuerza para oponerse a las restricciones impuestas por su madre y poder abrirse al mundo, pero Elena no dejará a su hijo ir tan fácilmente y está lista para hacer lo que sea necesario para mantenerlo cerca suyo. Así el filme decanta en el género del misterio y el terror. Dirigida por Roberto de Feo y protagonizada por Francesca Cavallin, Ginevra Francesconi y Justin Korovkin.