“Smooth Criminal” (1987) es, sin dudas, una de las canciones más populares de Michael Jackson. Su ritmo pegajoso, la mítica inclinación antigravedad y el videoclip inspirado en el film noir de los años 50 y en los pasos de baile de Fred Astaire, le han dado mucha fama a lo largo de las décadas.
Pero su letra, recientemente reciclada como meme, tiene un origen que va más allá de lo que parece.
¿Quién es Annie en “Smooth Criminal”?
Aunque a Quincy Jones, productor del álbum “Bad” (1987), no le agradaba del todo la grabación, Jackson siempre tuvo un cariño especial por la canción “Smooth Criminal”. Más allá de la dedicación que le puso a la coreografía y a la interpretación en sus recitales, el rey del pop menciona a cada rato a una tal “Annie”.
Se trata, a simple vista, de una mujer que ha sido asaltada en su departamento. De allí la pregunta insistente con múltiples combinaciones: “Annie, are you ok? So, Annie are you ok? Are you ok, Annie?”.
Durante mucho tiempo, el nombre Annie quedó librado al azar. Podía ser cualquiera el nombre de la mujer, pero era ese el utilizado porque simplemente pegaba con el ritmo de Jackson.
Otra teoría famosa habla de que la Annie de “Smooth Criminal” es Annie Oakley (1860-1926), pistolera del lejano Oeste que fue parte el espectáculo Buffalo Bill durante más de 15 años. Pero nada de esto es cierto.
Según se reveló en el documental “Bad 25″ (2012), dirigido por el cineasta Spike Lee, “Annie” es el nombre de la muñeca de reanimación cardiopulmonar (RCP) que había en el estudio de grabación donde se creó “Smooth Criminal”.
No obstante, la historia de esa Annie es bastante más macabra que el ataque que relata Jackson en su canción.
La trágica historia de Annie, que “bautizó” al maniquí de RCP
Le dicen “la chica más besada en el mundo”, pero debido a las vidas que posteriormente ha permitido salvar.
Generalmente, los maniquíes de primeros auxilios tienen la misma cara, que está inspirada en el rostro de Resusci Anne (que Jackson adaptó como “Annie”). Se trata de una joven que se suicidó en Francia a finales del siglo XIX.
En aquella época, la Policía encontró el cadáver de una chica muy joven en el río de la ciudad de las luces. Como no se sabía la identidad, el patólogo que realizó la autopsia conservó el rostro de la fallecida en forma de máscara mortuoria de yeso. Y no fue el único: con la intención de identificarla, la colocaron en una especie de exposición con otros cuerpos -algo común en la época-. Todos admiraban la belleza de esa mujer enigmática y de destino fatal.
La cara de esa muchacha se copió por cada rincón del París bohemio y luego cruzó el Atlántico.
¿A qué viene lo de la muñeca RCP? Pues en los años 50, cuando un integrante del comité de RCP de la Asociación Estadounidense del Corazón observó que los estudiantes que practicaban RCP entre ellos se arriesgaban a fracturas en las costillas, se acercó al fabricante de muñecas Asmund Laerdal para crear un modelo de entrenamiento realista.
Cuando pensaba en el diseño del maniquí, Laerdal recordó una máscara en la pared de la casa de sus abuelos y decidió convertirla en el rostro de su nueva “ayudante” para el entrenamiento de reanimación. Esa cara era la de Resusci Anne. O la famosa Annie, que por la canción de Jackson de los años 80 adquirió otro significado.