Muchas veces, para poder lograr esos personajes que parecen salidos directo de la imaginación. Pero pocos saben que no solo son apliques y un poco de maquillaje, muchas veces requieren horas de preparación (que luego se duplican por las horas de grabación), que se dificultan aun más cuando directores o actores se ponen en modo exigente.
Eso mismo fue lo que pasó cuando Jim Carrey se preparaba para interpretar al Grinch. “En el tráiler de maquillaje él de repente se paraba, se miraba en el espejo y apuntaba su mejilla y decía: ‘Este color es diferente del que hiciste ayer. Arréglalo’. Estaba usando el mismo color que usé ayer. Y ya sabes, ‘lo arreglé’. Cada día era lo mismo”, cuenta el maquillador de efectos especiales Kazuhiro Tsuji.
Es el mismo que ha hecho las películas Men in Black, Hellboy, The Curious Case of Benjamin Button. Pero asegura que la experiencia con Carrey fue una de las más difíciles.
Al final, el actor terminó por retractarse de sus actitudes y pedirle al maquillador, junto a una disculpa, que volviera a trabajar en la película. El resultado ya es conocido, y su trabajo le mereció el Oscar a Mejor Maquillaje y Peinado.
Uno de los actores que sorprendió al público en la premiere de la película, fue el actor Bill Skarsgård. Su papel era el del aterrador payaso Pennywise en la película It (2017), cuyo personaje requería un complicado maquillaje, con apliques en la cabeza para hacerla más grande. Pero fuera de la boca, que gracias a efectos especiales tomaba las horribles formas que puede verse en la película, todo lo demás iba por su cuenta.
De hecho, el actor explicó en una entrevista, que fue su habilidad con los ojos lo que le dio al final el papel del payaso. Sin duda, es algo perturbador.
Otro de los personajes que impresionó en su papel y maquillaje, fue Rey de la Noche de Game Of Thrones, una figura que inspira terror a todos los que conocen su nombre. En el universo de George R. R. Martin las adaptaciones fueron hechas de forma excepcional, hasta los impresionantes dragones.
Pero para el actor Richard Brake, interpretar al Rey de la Noche le costó horas de maquillaje y apliques. Aquí se puede ver parte del proceso.
Y si de personajes azules hablamos, se debe incluir la impresionante transformación de la actriz Karen Gillan para poder dar vida a Nébula, la conflictiva hermana de Gamora en Guardianes de la Galaxia. No sabemos cuanto debe haberse ajustado su cabello para poder parecer como una cabeza calva, pero el resultado es muy real. Incluso muchos fans aseguraban que en alguna de las entregas la actriz se había rapado de lo creíble que se veía.
Las transformaciones en personas reales
Pero hay veces que la transformaciones son más complicadas, como cuando los actores deben interpretar a personajes reales. Así fue para el actor Eddie Redmayne que tuvo que interpretar a Stephen Hawking en la película “La teoría del Todo”. Para ello, el equipo de maquillaje debió estudiar especialmente al cara del físico y los estragos que la enfermedad degenerativa ELA (Esclerosis Lateral Amiotrófica) habían hecho.
Luego, todo debía ser adaptado también a la misma cara del actor. Un desafío total que tuvo frutos, porque al final el actor ganó el Oscar de ese año.
Pero definitivamente quien peor la paso fue el joven actor Jacob Tremblay, cuando tuvo el protagónico de Extraordinario, la historia de un niño que nació con un problema de deformidad facial.
A pesar de ser conmovedora, lo que más llama la atención es la dedicación que se le puso a la cara del niño. El pobre Jacob terminaba casi con un casco completo puesto sobre su casa y su cabeza.