“En casa somos los dos con dos perras”, afirma el Mono Fabio, líder de Kapanga sobre la convivencia diaria con su hijo Tobías. Desde hace dos años se volvió rutina, y el músico junto al joven de 19 años comparten el ritual propio de la convivencia y despunta su amor por la música.
A lo largo de su joven vida, Tobías tiene tantos kilómetros recorridos como su padre con Kapanga. Desde bebé lo acompañó en los shows y el micro de gira se transformó en su otra cosa. Con una guitarra de juguete y su pelo largo, a muy corta edad despertaba la simpatía entre el multitudinario público kapanguero.
Su gusto por la música lo llevó a formar su propio grupo Los Tabaleros y la convivencia forzada 24/7 con su padre dio pie a que le dieran forma a ParDePe, el dúo musical en el que comparten al estilo fogón varias canciones del rock nacional, otras de Kapangas y algunas más personales.
Ese ritual que comenzó en el living de su casa, ahora lo llevarán por distintos escenarios con “El Tour Feliz”, la gira con la que recalan el sábado y domingo en Mendoza, con conciertos en el Cine Cervantes de San Martín, en Tunuyán y el Teatro Imperial de Maipú.
“Hace muy poco hicimos una gira por la costa cuando volvieron los shows en el verano. Se puede decir que esta es la vuelta”, afirma Tobías con un timbre de voz similar al de su padre.
-¿Era inevitable que eligieras la música?
Tobías:-Creo que pudo haber salido el tiro para cualquier lado. Me gustan otras disciplinas como el cine, que tiene que ver con el arte. Pero de chico llegué a decirle que quería ser camionero, futbolista. Pero el camino que más me gustó fue el de la música.
-Más allá de los clásicos y las canciones que tocan, ¿qué tipo de música los une?
Mono: -Esto lo hacemos para sentirnos bien. Cuando empezó la pandemia y surgieron los streaming, nosotros desde casa hicimos un show a beneficio del equipo que labura con Kapanga. Y vimos una buena respuesta de la gente, por compartir algo con mi hijo. Y cuando se abrió un poco todo lo probamos con el público y la gente la pasó bien. A nosotros nos gusta y nos une, es una banda en común, pero yo delego todo en Tobi, el dúo es él.
-¿Es mucha presión que delegue todo en vos?
Tobi: -Voy viendo, me gusta hacerlo. Voy buscando las canciones que nos gusten, siempre adaptándome a lo que él quiera cantar, porque si pongo canciones en inglés sería un desastre para ambos.
Mono: - ¡Pero me la banco! Por fonética la Mona Jiménez cantó en inglés también (ríe). Pero las canciones que tocamos mostramos algunas de la formación que tiene Tobi. Algunas versiones de Kapanga, después el repertorio puede variar, porque Tobi toca todos los estilos, puede sacar un tema de Las Pastillas, El Bordo, Los Caligaris o Antonio Ríos. Es como una rockola humana, toca todo. Y eso es lo atractivo.
-Hay un aprendizaje constante entre ambos.
Mono: -Sí. Yo descubro sonidos nuevos y lo que él hace. Además es chico y tiene un camino por delante. Y nos es tan fácil tocar un instrumento o cantar, si no lo practicas, es como el que quiere jugar a la pelota y entrena cada veinte días. Si vos le pones empeño, amor y sacrificio las cosas te van saliendo. Y tiene un montón para probar y disfrutar. Lo tomo como un disfrute, porque el público de Kapanga también lo conoce. Tobi desde los dos meses de vida se sube a un micro de gira. Y también participaba en los shows cuando era chico. Y eso se transformó en algo que hoy es realidad, compartimos la música seriamente, antes era un juego. Esto lo tomamos en serio más allá de pasarla bien.
-Pero es un formato ideal para estos tiempos y salió en el momento justo.
Mono: -También ayuda el contexto que estamos viviendo. Si todo estuviera normal, lo más probable es que el dúo ParDePe no pueda hacer una gira. Y esta es otra propuesta muy diferente a Kapanga. Igual estamos armando una gira para octubre o noviembre, en un formato diferente. Porque estamos asociados al agite y a corto plazo eso no va a volver a ocurrir. Y el público se tendrá que acostumbrar a eso, pero es lo que se puede hacer. Por eso estamos preparado otro formato, no podemos apuntar a un show multitudinario, es como bajar un poco los decibeles.
Y necesitamos reencontrarnos, hace un año y medio que no salimos de la provincia de Buenos Aires. Entonces necesitamos ese reencuentro con la gente, con cierta distancia, que es raro, pero de alguna forma tenemos que salir. Hoy siento que hay una luz al final del túnel, cosa que el año pasado era impensado. Y volveremos a arrancar en otro mundo y otra normalidad.
-Para vos ¿Subirte a un escenario con tu papá es natural?
Tobi: -Puede ser que me cueste más hacer un show con el dúo ParDePe, que tocar la guitarra con Kapanga o con mi banda. Pero creo que me cuesta hacer un show más íntimo. Aparte la idea de estos shows es llevar el living de nuestra casa, a cada escenario. Que nos imaginen en esa sintonía divirtiéndonos y tocando la guitarra.
-¿Tienen pensado grabar algo en este formato desenchufado?
Tobi: -Puede ser que se dé. Está la posibilidad, o nos separamos o grabamos (ríe).
Mono: - Por ahora es eso, mostrarle al público lo que nos une dentro de nuestra casa. Nosotros convivimos, en casa somos dos con dos perras. Y este año y medio la convivencia se hizo más fácil con la música de Tobi, su alegría. Seguir poniéndole música a la vida, porque cuando enchufa la guitarra es como una familia musical y yo siempre viví en una familia musical. Y ahí te das cuenta que no es verso cuando te dicen que la música cura y sana. Es verdad, nos pasa a todos, siempre te moviliza una canción.
Esta propuesta es mostrar nuestra intimidad y yo lo disfruto al máximo. Porque esto lo soñé antes de ser padre, siempre soñé que mi hijo compartiera la misma pasión que yo. Y lo pude cumplir, lo estoy logrando y estoy contento porque me pasó. Así como soñé y me pasaron muchas cosas con Kapanga, hoy me pasan cosas que soñé con un hijo. Y eso no tiene precio.
-Al margen de esta sociedad artística familiar es interesante la unión de generaciones y experiencias.
Tobi: -Sí. Ojalá pueda ser parte de la generación que represente nuestra música. Y no rendir homenajes y mucho menos faltar el respeto a los que tuvieron las cosas mucho más difíciles. Hoy con las redes sociales es impensado salir a pegar carteles por la costa. Eso ocurría antes, pero tampoco es tan fácil, porque la música varía mucho.
Mono: -La música es difícil y sostener un proyecto musical pasa muy pocas veces. Con Kapanga pertenecemos a un grupo selecto que sigue junto hace 25 años, con ganas de seguir haciendo cosas y tener la llama encendida. Y Tobi eso lo ve permanente, como se sostiene un grupo todos los días. El rock va pasando por distintos estadíos, tiene años muy buenos, otros no tanto. Ahora estamos viviendo muchos cambios; como la gente escucha música, que artistas se escuchan, quienes son los referentes. Los chicos de esta era nos ven como los viejos que grabábamos discos. Pero es lógico, porque nosotros a los viejos tangueros o rockeros también los veíamos así. Se está generando otra forma de escuchar música, igual hay chicos que escuchan los clásicos y eso convive.
Su paso por la cocina de MasterChef
La participación del cantante en la primera edición de Masterchef Celebrity el año pasado trajo tela para cortar. Pese a que fue uno de los primeros eliminados del certamen, luego tuvo su revancha en el repechaje y se llevó una buena calificación del jurado.
Esta experiencia le dio cintura al cantante, para cocinar un poco mejor de como lo hacía habitualmente.
-¿Dejaste definitivamente la cocina?
-Solo me dedico a comer (ríe).
“A lo que eran sus comidas hace dos años evolucionó un montón. Y la comida es lo que más nos une, porque es la pregunta más recurrente en la convivencia “¿Qué vamos a comer””, afirma Tobías.
-¿Cómo viviste esa experiencia?
-Muy bien, me gustó hacerlo. Igual me tocaron platos complicados, hay cosas que no haría nunca y otras que me gustó cocinar. Como por ejemplo cocinar un yacaré, un atún rojo, una vizcacha. Me tocaron platos difíciles para el que no sabe. Y siento que me desenvolví bastante bien, no le tuve asco a nada y terminé todos los platos que me pusieron adelante.
La Ficha
DÚO PARDEPE CON MONO Y TOBIAS FABIO
Funciones: sábado 21 de agosto, a las 22. Cine Teatro Cervantes (9 de julio 187, San Martín).
Domingo 22 de agosto: 14.30 horas, en el Mercedino (Tunuyán); 20.30 horas, en Cine Teatro Imperial (Perón y Pescara, Maipú).
Entradas: $1000. En www.ticketdirecto.com.ar, Kiosco Belgrano (Belgrano 55/San Martín), Melmack (Perón 26, Maipú) y Bicicletas Evolution (Costanera y Godoy Cruz, Ciudad).