Llevada a cabo en el Barclays Center de Brooklyn, en Nueva York, se desarrolló la cuadragésima edición de los premios MTV VMA’s, donde Olivia Rodrigo se consagró como la estrella de la noche.
La cantante participó tanto en las presentaciones en vivo como en la recepción de estatuillas, de las que consiguió tres de ellas y superó a varias figuras internacionales de la música.
Reconocida a través de redes sociales, luego de que su música se hiciera popular en los videos de tik tok, la joven alcanzó el reconocimiento mundial que le valdría tres premios MTV.
Resultó la ganadora de “mejor nueva artista”, “canción del año” y “actuación push” por ‘drivers license’, en una ceremonia especial que tras un año de pandemia, volvió a tener público presencial.
La joven de 18 años recibió sus premios de la mano de Jennifer López y exclamó la emoción que siente en un año que le ha devuelto tanto. Rodrigo aseguró que este es el año “más mágico” de su vida y dedicó sus premios a “todas las chicas que escriben canciones en el suelo de sus habitaciones”.
Se trata del primer evento que cuenta con público presencial en la entrega de premios, algo que tras un año de pandemia, se añoraba profundamente.
Las presentaciones en vivo
La reina del pop, Madonna, fue la encargada de inaugurar la noche con un homenaje a los 40 años de MTV y la influencia de ello en su carrera. Digno de la reina, Madonna se presentó vestida con un “body” estilo dominatrix, a sus 63 años, dijo de MTV: “Cambió mi vida, cambió el mundo y creó una nueva forma de arte entera”.
Una de las estrellas más esperadas de la noche fue Justin Bieber, quien regresó a los escenarios de MTV luego de seis años sin formar parte de la grilla. Bieber sorprendió luciendo unos pantalones y chaqueta super holgados y ocultándose bajo una capucha.
El cantante canadiense, quien contaba con siete nominaciones, fue distinguido como mejor artista y también triunfó en la categoría pop (“Peaches”, junto a Daniel Caesar y Giveon).
Por su parte, Lil Nas X, el primer rapero abiertamente homosexual en alcanzar la fama, causó sensación en la alfombra roja con un vestido lila largo recubierto de lentejuelas. Sobre el escenario, deslumbró quitándose capas hasta quedarse en unos bóxers de purpurina, interpretando “Industry Baby” junto a Jack Harlow y después su premiado “Montero (Call me by your name)”.
El artista se consagró como el ganador del videoclip del año -premio al que suma los de mejor dirección y efectos visuales-, y lo festejó exclamando: “¡Gracias a la agenda gay!”.
Por otra parte, Billie Eilish hizo voto de presencia y se llevó dos estatuillas a mejor vídeo latino por su colaboración “Lo Vas a Olvidar”, con Rosalía, y la de “vídeo para el bien” por su canción “Your Power”, sobre las conductas sexuales inapropiadas. “Tenemos que proteger a nuestras mujeres jóvenes a toda costa”, declaró.
Otros momentos de la noche
La euforia y emoción se vivió a flor de piel. La música latina tuvo su momento, pese a que no se presentó en la gala, mediante las figuras de Camila Cabello, Shawn Mendes y Tainy. Con una cabina animada, los músicos hicieron acto de presencia.
Además, Ozuna, que dedicó su divertido “La Funka”, rodeado de peluches, a Puerto Rico y República Dominicana.
Entre otros premios destacados estuvo el novedoso “Icono Global de EE.UU.” que fue otorgado a los rockeros Foo Fighters. “Hemos sido una banda por 26 años y está muy bien, pero queremos dar las gracias a toda la gente de MTV de ayer y hoy”, dijo emocionado Dave Grohl, cantante y guitarrista de la banda.
Uno de los momentos más sensuales lo protagonizó la maestra de ceremonias, Doja Cat, quien cantó algunos de sus éxitos suspendida en el aire, con su figura enmarcada por las luces y el humo. La cantante se consagró como ganadora de la mejor colaboración por “Kiss Me More” junto a SZA.
Finalmente, la noche más decepcionante la vivió Megan Thee Stallion. La rapera era una de las favoritas, pero se marchó sin distinciones, pese a la polémica suscitada por su provocativo tema “WAP”, con Cardi B.