Cuando pensamos en renovar el jardín o armar un pequeño oasis en la terraza, las altas temperaturas en el verano y la exposición directa del sol en ese espacio son dos factores decisivos para lograr el plan deseado.
Muchas veces cometemos el error de poner una especie apta para sol en un lugar con luz natural directa y las plantas no resisten. Al margen del cuidado especial que algunas merecen, los rayos del sol en las horas críticas como el medio día o la tarde generan un proceso de estrés, que puede llevar a secarlas o quemarlas por completo.
Por eso, la elección de las especies no debe ser una cuestión caprichosa o simplemente por el gusto de tener una flor colorida.
“Las especies para terrazas o un jardín expuesto mucho tiempo a pleno sol es difícil de encontrar y recomendar. Primero es importante evaluar la cantidad de horas que la terraza o jardín recibe sol directo y en base a eso tomar una decisión. En el caso de la terraza, al ser baldosas, el calor se concentra más que en el césped. Podría optar por plantas como el penisetum rubra o el coirón que actualmente están muy de moda y no sufren una gran deshidratación”, detalla la licenciada Agrónoma Andrea Román de En Las Ramas sobre los espacios con alta exposición solar y la posibilidad de diseñar un pequeño vergel.
Rayando el sol
Aunque el proceso es lento y requiere de cuidado y supervisión, hay plantas que nos permiten combatir el calor o generar sombras, creando lugares más frescos al aire libre. En este caso hay que cultivar la paciencia y permitirle a la especie adaptarse al espacio y que no sufran un proceso de deshidratación y estrés, lo que es muy común cuando la temperatura supera los 28° C.
“Se pueden colocar enredaderas, como pérgolas, o pequeños árboles que nos aporten sombra. Para elegir una planta apropiada debemos prestar especial atención a la cantidad de sol que recibirá, al objetivo que tengamos a largo plazo en dicho lugar y al espacio que tenemos. También se puede optar por rosas trepadoras, bignonias, madreselvas, jazmines, santa rita, arvejilla, glicina, entre otras”, sugiere la especialista.
Las terrazas para muchos son la única posibilidad de aire libre en el hogar, que no cuenta con césped o un suelo natural, por eso la única opción es criar un vergel en macetas. Pero ¿puede crecer una gran enredadera o ligustro de esta manera?
“Se pueden plantar estas especies que crecen a lo alto en una maceta. Sólo que tendrá un crecimiento un poco más limitado en comparación con los que se encuentran en suelo. Recordemos que debemos ir cambiando el tamaño de macetas a medida que la planta vaya creciendo para que tenga mayor espacio de sostén para sus raíces”.
Las suculentas y cactus son las plantas predilectas para una terraza con gran exposición solar, dado que resisten las altas temperaturas, y el sol es fuente de su crecimiento y se acelera el florecimiento de la especie. Algunas crecen con mayor facilidad y logran tamaños considerables, que tapan el sol en muy poca proporción, pero son nobles al paso del tiempo y los rayos del sol abrasador.
Cuidados y terapias para dar batalla
Para que las plantas no sufran deshidratación y una situación de estrés que dañe su estructura debemos prestar atención a los cuidados que necesita, en cuanto al riego, sus raíces y las plagas propias de la época, que pueden arruinarlas.
“Lo más importante en esta época es estar atentos a un riego adecuado y colocar la planta en un lugar que esté en sus condiciones óptimas para su crecimiento. Y controlar periódicamente las plagas que puedan desarrollarse para atacarlas en el momento oportuno”.
En el caso que la planta se queme por el sol, lo recomendable es cambiarla de lugar para que se pueda recuperar, y no se dañe del todo. En la actualidad, los rayos del sol pueden causar estragos en algunas especies y en pocos días deteriora su follaje.
Pautas para un jardín soleado
-Elegir una especie que resista altas temperaturas, como rosas trepadoras, bignonias, madreselvas, cactus y suculentas.
-Controlar el crecimiento de las plantas en maceta.
-Riego adecuado, entre tres y cuatro veces por semana si la planta lo requiere.
-Evitar que el sol queme el follaje, y cambiar de lugar la planta si es necesario.
-Las enredaderas o árboles pequeños son una alternativa para generar espacios de sombra.