El 24 de septiembre pasado se cumplieron 30 años de la salida del segundo disco de Nirvana. “Nevermind” marcó un antes y después no solo en la banda, sino en el rock internacional y el estilo que imprimió Kurt Cobain a comienzos de los ‘90, con su poética desgarradora y un sonido poderoso, que conquistaría a la juventud de aquel entonces y sería un punto de partida para los fanáticos del género.
A propósito del aniversario, la banda tributo Seattle Supersonics comenzó su gira “Nirvana Nevermind 30 Aniversario”, que los llevó por grandes escenarios de Argentina y esta noche volverá a sonar en el teatro Plaza de Godoy Cruz.
Un disco y el comienzo de una historia
“Nevermind” significa un álbum icónico para la música. Desde el arte de tapa con un bebé flotando el agua con un billete de un dólar, toda una osadía en esos tiempos; pasando por temas emblemáticos como “Come as You Are”, “Luthium”, “On a Plain” o “Endless, Nameless”, el disco resume el mensaje único de la banda que sigue vigente hasta la actualidad.
Un clásico difícil de interpretar, no solo por el poderío del sonido, sino por traer al presente ese espíritu que resuena en cada canción. Y para Ezequiel Díaz, Esteban Molina y Cristian Montero, el trío que conforma Seattle Supersonics no deja de ser un reto más en sus once años de recorrido homenajeando a la banda de Kurt Cobain.
“El disco es muy importante no solo de la banda sino de la historia de la música. Es la puerta de entrada o quienes descubrimos la banda. Es un disco que tiene esas canciones que se transformaron en himnos. Y eso representa un desafío muy grande porque la gente lo conoce en detalle y hay que estar a la altura para hacerlo. Desde el año pasado comenzamos a prepararnos tanto en lo musical como en la puesta, vestuario y escenografía para que salga todo lo más prolijo posible”, comenta Ezequiel Díaz vocalista del grupo tributo que vuelve por tercera vez a nuestra provincia.
Con este espectáculo homenaje, la banda viene de actuar en el Estadio Quality de Córdoba, el teatro Vorterix de Rosario, el teatro Broadway de Buenos Aires, entre otros escenarios en los que debutaron con un concierto diferente, donde repasan todos los temas de “Nevermind” y proponen un bonus track con otros clásicos del grunge.
Para los que subestiman a las bandas tributos, el engranaje de un concierto no es menor al de otro grupo. No solo tienen que encontrar la perfección de la similitud del sonido, sino poder recrear ese espíritu propio de una época y de Nirvana.
“Siempre tenemos esa discusión, el tema de hacer música propia es lo mejor para el músico y lo respetamos. Pero el ser intérprete tiene un grado de dificultad alto. En nuestro caso desde un comienzo la idea siempre fue trabajar lo que más se pueda para lograr ese detalle, llegar a esa similitud y es un trabajo que llevó mucho tiempo. Y además es algo que no termina nunca porque siempre hay algo que aparece y tenemos que mejorar”.
-De este disco, ¿cuál es el desafío a la hora de interpretarlo?
-Es uno de los discos más difíciles de interpretar. Y además tiene un sonido muy particular que es difícil lograrlo, por eso trabajamos con la mayor similitud posible, pero son canciones complicadas para interpretar.
-¿Qué devolución tienen del público?
-Siempre nos sorprendemos, porque hay chicos muy jóvenes hasta personas de 40 a 50 años que crecieron con esa música. Y creo que lo que llama la atención de los shows es la puesta audiovisual y el recrear todo lo que era la banda, que va más allá de lo musical. Es la posibilidad de generar esa nostalgia y cercanía con la época. Y el público devuelve esa energía en los shows y se logró una característica importante de nuestros conciertos.
La Ficha
SEATTLE SUPERSONICS CELEBRA 30 AÑOS DEL DISCO “NEVERMIND”
Día y hora: hoy, a las 20.30.
Lugar: Teatro Plaza (Colón 27, Godoy Cruz).
Entrada: $1000. En entradaweb.com.ar y boletería antes del show.