“No intentes comprenderlo: siéntelo”, dice uno de los personajes de “Tenet” en algún momento de esta película. Imposible recordar exactamente en qué parte de ella, pues los detalles se pierden rápidamente en este vértigo del espacio-tiempo. Eso sí: podría resumirse así la experiencia de sentarse a ver, nuevamente en el cine después de casi un año de pandemia, el último artificio de Christopher Nolan. Solo siéntanlo.
Muchos quisieron que éste fuera el gran regreso, por lo que en el primer fin de semana de reapertura 21 mil de los 75 mil espectadores le pusieron sus fichas a Nolan.
Una jugada que no debe haber defraudado a nadie, pues “Tenet” es Christopher Nolan en estado puro: es, resumiendo, una película que condensa y a la vez multiplica a la enésima potencia las virtudes y los pecados de este director, famoso por hacer películas de cierta “complejidad” narrativa (“Memento”, “Interstellar”, entre otras ). ¿Será la película más “Christopher Nolan” de Christopher Nolan? Para muchos sí.
Protagonizado por John David Washington, Robert Pattinson y Kenneth Branagh, este tanque de 225 millones de dólares es un derroche de efectos especiales, escenas para quedarse sin aliento, locaciones ostentosas y diversas, extras, bombas y, como no podía ser de otra forma, de locuras narrativas.
Si en “Interstellar” el director enloquecía con paradojas y viajes en el tiempo, y en “Origen” montaba un universo imposible de micro y macromundos y fractales, en “Tenet” va hacia un concepto más ambicioso: la doble realidad. ¿Puede existir un mundo en reverso, donde la misma ley física de la causa y el efecto se vea alterada? En el cine sí, pero la idea sola resulta tan ambiciosa que habría hecho desistir a cualquier director. Menos a él.
El argumento trata sobre dos espías que van descubriendo paulatinamente (y nosotros con ellos) los devastadores efectos de un nuevo tipo de materia encontrada. Una materia que parece -literalmente- ser eyectada desde el futuro y que se rige por leyes físicas directamente contrarias: como en un mundo que se rebobina, las balas vuelven a las pistolas en lugar de salir de ellas y, lo que se quema en esta realidad, en la otra se congela. Sí, demente.
Imagínense que, lo que empieza con una bala recibida desde el futuro, termina convirtiéndose en una aventura de espionaje a lo “James Bond” en dos tiempos distintos, con mundos contrapuestos que, eventualmente, podrían chocar entre sí, si es que hubiera un villano tan villano que quisiese destruir todo lo conocido. Que por supuesto lo hay. Ese es, de hecho, el caos que amenaza acabar con todo. Algo mucho peor que una Tercera Guerra Mundial o una pandemia (el mundo en el que iba a estrenarse este blockbuster, hace un año, era radicalmente otro).
A ver: o al menos es esto lo que entendemos de “Tenet”, porque esta película (al menos que optemos por verla dos o tres veces) es por momentos incomprensible. Y está mal que así sea, pues Nolan no logra suavizar acá lo peor de sí mismo, que es esa tendencia a querer darle a sus artilugios sustento científico. En “Interstellar” era palabrerío que sacaba de clima, pero acá es una abundancia insoportable de explicaciones, que solo el ritmo imparable, la fotografía magnífica (de Hoyte van Hoytema) y la música visceral de Ludwig Göransson consiguen atenuar.
Los detractores de Nolan no le perdonan que prefiera el espectáculo sesudo e “intelectual” en lugar de darnos un guion acabado y sin lagunas. Algo que en esta película llega al extremo, pues no hay lagunas, sino mares de incongruencias y detalles inexplicados. Claramente, fueron algunas de las concesiones que Nolan tuvo que hacer para traer a la vida a un filme tan poderoso y demencial, y quedará en cada espectador el peso que le dé a estos “detalles”.
¿Que hay que verlo en el cine? Por supuesto: pocas veces se estrenan películas tan espectaculares. Es una “experiencia Christopher Nolan” garantizada. Esa experiencia se la tienen que dar los que lo conozcan, los que no lo conozcan... y los que lo critican también.
Ficha
“Tenet”. De Christopher Nolan. Reino Unido. 2020. 150 min. Ciencia ficción / Thriller. Actúan John David Washington, Robert Pattinson, Elizabeth Debicki, Kenneth Branagh, entre otros. En Cinemark, Cinemacenter, Cinépolis, Cine Cervantes, Cine Ducal. Nuestra opinión: Muy buena.
