Una de las bandas más emblemáticas de todos los tiempos vuelve en formato de streaming. Rindiendo homenaje a la obra de Pink Floyd, tanto al disco como a su película, llega esta producción para disfrutarla por primera vez desde casa.
Con más de 120 artistas en escena y la voz de P.J. Olsson (vocalista de The Alan Parsons Live Project) en el rol principal, esta obra promete trasladarnos a “The Wall”, el film que hoy es considerado una cinta de culto.
Desde una pequeña idea que les surgió a los hermanos Guillen, quienes han interpretado canciones de la banda durante hace años, surge esta iniciativa de llevar al teatro de una forma majestuosa esta obra tan particular y rica en todos los sentidos.
“Nosotros lo hicimos en la versión que se conoce de construir una pared de ladrillos como hacia Pink Floyd en su momento, lo hicimos en el año 2004 y 2005 en el Luna Park. Pero después de que vino Rogers Waters con su gira The Wall y tiene el récord de 9 conciertos en River, con eso trajo una estructura a otra escala”, explica el creador de esta obra, Gastón Guillen.
Fue bajo la idea de Gastón que se concretó este concierto de música en vivo, acompañado de orquesta y coros con arreglos y dirección de Jorge Rosso, y una original puesta en escena y dirección artística a cargo de Cristian Hansen.
“Lo hicimos con nuestros recursos y era digno, pero después de Waters era realmente imposible competir con eso y nadie seria tan ridículo de competir contra el propio autor. Reescribimos un guion readaptando el relato y visualmente lo vamos a mostrar desde otro lado.”
Y obviamente, la tecnología fue el medio para lograr imponer una producción que tuviese su lugar junto a la obra del propio Roger Waters. “Valiéndonos de estos recursos modernos, telones que aparecen y desaparecen, pantallas LED, proyecciones 3D, actores y otros recursos, con eso nos valimos bien para no volver después de 15 años con los mismos ladrillitos que ya hicimos y que hizo Waters.”
Esta primera y, hasta ahora única, transmisión tendrá lugar esta noche a las 21 a través de la plataforma Blue Team Show. Las entradas se adquieren a través de www.blueteamshow.com.
El reestreno por streaming
Con una superproducción donde hay más de 100 artistas en escena, con música y orquesta en vivo, y la voz principal del gran P.J. Olsson, su director apuesta a llevarla a las pantallas digitales para disfrutar un show que imposiblemente podría hacerse en este momento.
“Como todo, tiene una ventaja y una desventaja. La desventaja es que no tenes la vivencia de estar presente, vibrando con la música que te lleve y transporte vivencialmente. Ahora tiene otras ventajas, vas a poder tener primeros planos del cantante, del guitarrista, los actores, si estás lejos en el teatro no lo vas a ver. Acá tenes la posibilidad de sentir la música igual y además ver cosas que suceden en el escenario que en el lugar no se puede ver”, explica.
La mayoría de los conciertos de esta magnitud cuentan con algunas piezas sonoras grabadas, pero una de las particularidades de esta obra es que cada una de las notas musicales son en vivo.
“Hay una orquesta que está en un foso y la gente no suele verlo, pero si escucharlos. Cuando Pink Floyd o incluso Waters trae inmensa producción a River, jamás hicieron The Wall con orquesta en vivo, en el estudio sí, pero en vivo era grabada. Nosotros tenemos la orquesta compuesta por 30 personas además de 30 voces en el coro.”
Un trabajo de una magnitud increíble que reúne a 120 artistas en escena y 40 personas más en producción, coordinando un elenco multitudinal.
Es sin dudas una experiencia que disfrutarán fanáticos de la banda e incluso aquellos amantes de la música que lograrán apreciar un trabajo de otro nivel. “Queremos llegar a la audiencia de modo tal que se emocionen a través de una experiencia visual, auditiva y que puedan involucrarse desde su casa en la historia, vivenciarla y dejarse permitir que las emociones y sentimientos que aparezcan sean empáticos con lo que sucede. Tenemos actores, músicos y un gran elenco que buscan encontrar esto.”
La doble cara de la moneda
“Pink Floyd The Wall” es una de las películas que se considera de culto hoy en día. Varios son los factores que la colocan en una de las obras que deben apreciarse, vacilando entre su composición visual, la historia detrás del personaje y la increíble banda sonora.
La esencia que acompaña a la gran obra escrita por Roger Waters está presente en la propuesta de Gastón Guillen, aunque un tanto diferente.
“La película tiene un protagonista que se llama Pink que es quien pasa por todos los estados de ánimo, acá todo eso sucede, pero contamos la historia a través de la madre. La pareja de Pink, la madre, el profesor del colegio, todos han tenido incidencia en sus estados de animo y sus matices más oscuros, por eso también es el nombre de la obra haciendo el juego de palabras.”
- ¿Por qué decidieron elegir a P.J. Olsson como vocalista de la obra?
En su momento cuando quise hacer esto, me hice un listado de 50 cantantes internacionales de primer nivel y con suerte cuando llegué al número 48 alguno me responde (ríe).
Tuve la suerte de que la tercera es la vencida y fue el caso de P.J. Olsson, no sé por qué estaba en tercer lugar, pero caprichosamente fue el número tres. No solo dijo que sí, sino que estaba super contento de hacer este doble rol de cantar y actuar.
- Fue obra del destino…
Todo está vinculado, no es que yo traigo al cantante de U2 con lo bueno que sería, sino que elegí al cantante de The Alan Parsons porque fue el ingeniero de sonido de The Dark Side of the Moon, no era casualidad. Tuve la suerte de que no solo me contestó, sino que vino en dos oportunidades y esta dispuesto a seguir girando con nosotros cuando la pandemia termine.
- Esto de que el protagonista vacila entre la oscuridad y la luz, ¿a qué se refiere?
Tiene connotaciones muy oscuras, pero también tiene su parte clara, porque no voy a contar cómo termina, pero al final el protagonista y si el público se pone en su lugar, uno en su vida tiene la posibilidad de elegir cómo la quiere vivir. Si vos querés estar aislado y tapado por una pared podés, pero también tenés la posibilidad de abrirte al mundo y trascender esa pared, tenés toda la libertad de reescribir tu vida como quieras.
- El mensaje de la obra, ¿tendrá una connotación diferente en los tiempos que corren?
La música representa una paleta tan amplia de sentimientos que nos puede llevar de un lado a otro en segundos. A su vez, es una compañía para nosotros desde la familia, amistad, la gente que esta sola se acompaña con música, y esta quienes eligen acompañar su estado de ánimo con ella.
Uno finalmente decide qué estado de animo quiere tener y en este momento tan complicado por un montón de cuestiones, pienso que el mensaje de la obra es de libre interpretación. Da todas las herramientas para decidir si traspasamos ese muro y vivir realmente libres a pesar de esta maldita pandemia que nos ha oprimido mucho o no.
- Es un show donde los sentimientos juegan un papel importante.
El feedback después de presentar este show, hace 15 años en el Luna y hoy por streaming tiene eso, la posibilidad de emocionarse y sin tener vergüenza de eso. Hay que dejarse llevar, si querés emocionarte hacelo, es el único propósito que tiene esto, la música busca trascender cualquier tipo de emociones.