Tobey Maguire (46) es uno de los rostros más conocidos en el cine gracias a su encarnación de Peter Parker/Spider-Man en la exitosa trilogía (2002-2007) dirigida por Sam Raimi. Sin embargo, el actor no ha sido constante en su carrera posterior al fenómeno arácnido. Y no porque le falte talento, todo lo contrario. Tomó la decisión personal de alejarse de las cámaras más mediáticas, probar con la producción y elegir proyectos puntuales como intérprete.
Con el estreno en cines de “Spider-Man: sin camino a casa” (Spider-Man: No Way Home), los fanáticos de Marvel han aclamado la aparición del primer actor que dio vida al superhéroe, en especial por la conexión nostálgica y emocional de aquella saga más humana y autoral que el rimbombante Marvel Cinematic Universe (MCU).
Los inicios de Tobey Maguire como actor
Tobey Maguire nació el 27 de junio de 1975 en Santa Mónica, California. Si bien al principio estuvo interesado por la cocina, luego dio un vuelco a la actuación. En ambos casos, ajeno a la educación más tradicional: “Realmente no me entregaba a la escuela”, dijo en algún momento.
Su debut en el cine se dio con un rol secundario en “El genio” (The Wizard, 1989), una comedia dramática apenas recordada por revelar en sus imágenes uno de los videojuegos más vendidos de todos los tiempos, Super Mario Bros. 3.
En su tramo como intérprete infantil, Tobey Maguire hizo comerciales y papeles menores en televisión, tiempo en el que se cruzó con Leonardo DiCaprio, con quien forjó una larga amistad tanto laboral (compartieron ”El gran Gatsby”, 2013) como personal.
Son conocidas las anécdotas de ambos por pelear por un mismo papel. DiCaprio ganó el rol principal en la serie “Parenthood” (1990) y de la película “Vida de este chico” (This Boy’s Life, 1993, donde salía Robert De Niro), dejando a Maguire en un rol accesorio. De todos modos, nunca tuvieron problema alguno.
Tres filmes le dieron a Maguire cierta notoriedad antes del fenómeno arácnido. “Desmontando a Harry” (Deconstructing Harry, 1997), donde interpretaba a un alter ego de Woody Allen; la recordada “Pleasantville” (1999) de Gary Ross; y “Cabalgando con el diablo” (Ride with the Devil, 1999) de Ang Lee.
Tobey Maguire, el primer Spider-Man del cine
La preproducción de la adaptación cinematográfica de Spider-Man fue caótica e infernal durante décadas, tanto que merece una nota por sí sola. Para finales de los 90, y antes de que la responsabilidad fuera a manos de Sam Raimi, James Cameron era el director señalado por Sony/Columbia Pictures y quería a DiCaprio -antes de castearlo para “Titanic”- en el rol de Peter Parker, aunque también aparecieron en la nómina Jude Law, Freddie Prinze Jr., Jake Gyllenhaal y hasta Heath Ledger. Esta vez, el triunfo fue para Maguire.
Para entonces, el actor era algo grande en edad para encarnar a un joven de 17 años en su último año de secundaria, pero su carisma, valentía y ternura vencieron y le valieron el cariño inoxidable de millones de fanáticos por dos décadas.
Las tres películas de Sam Raimi recaudaron más de 2.500 millones de dólares e impulsaron, junto con las adaptaciones de X-Men, el reinado de los superhéroes de Marvel en el siglo XXI. Cómics derivados, videojuegos, juguetes, series animadas, atracciones, más películas, reboots, multiversos...
Además, para beneplácito de Maguire, tanto “Spider-Man” (2002) como “Spider-Man 2″ (2004) suelen encabezar las preferencias para responder “¿Cuál es la mejor película del Hombre Araña?”.
Tobey Maguire después de Spider-Man
La filmografía de Maguire es bastante acotada pese a ser uno de los rostros más populares en el cine de Hollywood.
“Entre hermanos” (Brothers, 2009), de Jim Sheridan, fue un intento de despegar a Tobey Maguire del traje azul y rojo. Allí interpretó a un marino desparecido por años en Afganistán que vuelve a casa traumatizado por la guerra y descubre una sorpresa poco agradable de su esposa (Natalie Portman). Al actor le valió una nominación al Globo de Oro.
Mejor desempeño en taquilla tuvo la adaptación más reciente de “El gran Gatsby” (The Great Gatbsy, 2013), con DiCaprio como coestrella. No obstante, el filme de Baz Luhrmann no gozó del mismo cálido recibimiento entre la crítica.
En tanto, “La jugada maestra” (Pawn Sacrifice, 2014), biopic del ajedrecista Bobby Fischer, también fue un fracaso en taquilla, aunque dejó elogios para el trabajo protagónico de Tobey Maguire.
La última vez que supimos de Maguire fue en la animada “Un jefe en pañales” (The Boss Baby, 2017), donde puso su voz como narrador.
El próximo desafío tanto actoral como de producción para Maguire será “Babylon” (2022), drama de época de Damien Chazelle (”La La Land”) con Brad Pitt y Margot Robbie. ¿Será su vuelta a las grandes ligas? Mientras tanto, los fans de Marvel pueden especular con Tobey en el multiverso derivado de “Spider-Man: No Way Home”.
Tobey Maguire y los problemas con el póker
El libro y la posterior película “Apuesta maestra” (Molly’s Game, 2014) revelaron un lado más oscuro de Maguire y provocaron una atención negativa por parte de la prensa estadounidense.
Se rumoreó en su momento que el papel de Maguire influyó en el desarrollo del manipulador personaje del Jugador X (Michael Cera en el filme), un famoso que iba motivando a otros a participar en partidas clandestinas de póker.
Desde 2004, Maguire se había hecho famoso por su desempeño redituable en torneos internacionales de cartas, incluso junto a celebridades como DiCaprio y Ben Affleck. El problema es que, supuestamente, Maguire le robó el juego a Molly Bloom, lo que llevó a la empresaria a mudarse a Nueva York, además de presuntas estafas a otros apostadores.
En el costado personal, Tobey Maguire es vegano desde 2009 y estuvo casado hasta 2020 con la diseñadora de joyas, Jennifer Meyer. Ambos tienen dos hijos, de 15 y 12 años.