Este miércoles, el Tribunal de Justicia de Los Ángeles, Estados Unidos, decidió remover la tutela judicial al padre de Britney Spears con la cual controlaba la vida de su hija desde hacía 13 años.
La suspensión de Jamie Spears tiene efecto inmediato, y será reemplazado con un tutor provisional “en el mejor interés” de Britney Spears, dijo la jueza Brenda Penny. “El señor Spears debe entregar todos sus activos y poderes como tutor”, expresó.
El tutor provisional permanecerá al frente hasta el 31 de diciembre de este año, aunque hay expectativas de que el acuerdo sea deshecho antes de eso.
El controversial acuerdo, que la princesa del pop consideraba “abusivo”, fue decretado en 2008 luego de que Britney atacara a un paparazzi en una estación de gasolina y entregaba a Jamie Spears el control financiero y personal de la cantante.
Su abogado, Mathew Rosengart, había solicitado esta semana la remoción inmediata de Jamie Spears en una petición presentada ante la justicia.
“Cada día que pasa con él como su tutor -cada día y cada hora- es un día en que le causa angustia y dolor a su hija”, dice el documento.
Estas afirmaciones fueron aparentemente reforzadas por un documental del New York Times divulgado el viernes, que sostiene que Jamie Spears tenía aparatos de vigilancia instalados secretamente en el cuarto de Britney para grabar sus conversaciones.
“Me hacía pensar en alguien que estaba en una prisión”, dijo un exfuncionario de seguridad a los productores del documental “Controlando a Britney Spears”.
Los abogados de Britney esta semana dijeron que las afirmaciones del documental sobre Jamie Spears revelaban “horribles y excesivas violaciones de la privacidad de su hija adulta”.
Jamie Spears negaba vigilar de forma ilegal a su hija, de 39 años.
Otro documental, “Britney vs Spears”, que Netflix divulgó el martes, afirma que Britney trató dos veces de contratar su propio abogado en los primeros años de la tutela pero le fue negado.
En julio, Britney pudo finalmente colocar su propio abogado (Rosengart) y el mes pasado el propio Jamie Spears presentó un pedido para finalizar la tutela de Britney.
Ese miércoles, un grupo de fans cerró una calle para manifestarse a favor de la cantante pop. “Free Britney”, se podía leer en varias pancartas. Otros llegaron desde temprano para conseguir un puesto en la sala donde se celebró la audiencia, que estaba completamente llena.
Los representantes de Britney y sus fans han acusado a su padre de beneficiarse económicamente de la tutela, que le fue impuesta después de que ella sufriera un quiebre emocional en 2007, cuando afeitó su cabeza y atacó a un paparazzi en una estación de gasolina.
Mientras tanto, Jamie Spears objetó la propuesta de Britney de escoger un tutor provisional para reemplazarlo diciendo que el contador público John Zabel no tiene la experiencia necesaria, de acuerdo con versiones de los medios de comunicación estadounidenses publicadas esta semana.
Del otro lado, los abogados de Britney dicen que su padre “nunca estuvo a la altura”, citando en su petición alegaciones de supuesto alcoholismo y “el trauma que le causó a su hija desde su infancia”.
Muchas de esas afirmaciones pueden ventilarse este miércoles cuando un total de 15 peticiones están en fila para ser escuchadas por la juez Brenda Penny en un tribunal de Los Ángeles.