La exitosa serie de Netflix “El juego del calamar” no deja de sembrar polémicas y cambios desde su estreno. La violencia, las advertencias y el cambio del número telefónico son algunos de los detalles que han prosperado durante los últimos días y que serán modificados desde la producción.
Aunque ahora se suma algo más: Netflix eliminará algunas escenas de la serie en donde se veía un número telefónico auténtico.
“Junto a la compañía productora estamos trabajando para resolver esta cuestión, incluyendo la edición de escenas con números telefónicos donde sea necesario”, indicó la compañía en un comunicado dado a conocer este martes.
La polémica surge a raíz de las constantes quejas que un ciudadano surcoreano presentó por ser el dueño del número que figura en la serie. Así es que el usuario admitió que recibe incontables llamadas de seguidores de la serie que lo acosan día y noche.
“Me llaman día y noche para satisfacer su curiosidad”, señaló el ciudadano anónimo en un artículo del periódico coreano Money Today. Esto, admiten desde la agencia gubernamental Ofcom de Inglaterra, está vulnerando las leyes vigentes de protección de la identidad.
Es por este motivo que Netflix tuvo que tomar cartas en el asunto y reeditará algunas escenas de la serie para evitar que infrinjan las normas.
Sin embargo, ésta no es la primera denuncia que recibe la plataforma de streaming. Anteriormente, un servicio de internet de Corea del Sur realizó una demanda contra Netflix por el excesivo uso de internet de parte de sus usuarios.
Así fue que SK Provider, la compañía proveedora de internet, inició una demanda donde señala que Netflix es la segunda marca generadora de tráfico en Corea del Sur detrás de Youtube.
Además, afirma que plataformas como Amazon, Facebook y Apple pagan una tasa extra por el uso de ancho de banda. En este contexto, SK reclama que Netflix pague el mismo canon de manera retroactiva a mayo 2018, e hizo un estimado según el cual solo por el tráfico generado.
Según los cálculos, en 2020 Netflix debería pagar 28 mil millones de wones, unos 20 millones de dólares.