Luego de que Scarlett Johansson demandara a Disney por el estreno de la última película del Universo Cinematográfico de Marvel “Black Widow”, muchos actores y actrices comenzaron a alzar su voz en contra de la productora.
Uno de ellos es el caso de Emma Stone, quien podría demandar a Disney por el estreno de Cruella, la precuela de la saga 101 Dálmatas.
La actriz podría estarse preparando para hacer su golpe, al igual que su compañera Johansson, debido a que en su caso se dio una situación particular.
Recordemos que los contratos de los actores contemplan, además de la paga acordada, un porcentaje de ganancias que el filme obtenga en la taquilla. En este caso, ambos contratos mantuvieron fuera las ganancias que se dieron a través de Disney Plus.
Cruella ha logrado recaudar más de 221 millones de dólares en todo el mundo, cifra que contempla únicamente sus ganancias en salas de cine.
También es el caso de Emily Blunt, quien podría estar barajando la misma opción en respecto a Jungle Cruise. Según Variety, la intérprete ha expresado su disconformidad con Paramount por cómo decidió distribuir la secuela de Un lugar en silencio.
Con la llegada de la plataforma Disney Plus, los estrenos se han visto modificados a lo que conocíamos como “normal”. De esta manera, muchas producciones que se dieron durante la pandemia, encontraron su espacio de estreno a través de la plataforma de streaming.
Tal fue el caso de películas animadas como Soul o Luca. Esto, además de limitar el acceso de los usuarios ya que sólo pueden visualizarse pagando un monto extra a la suscripción base, modificó en gran parte la recaudación que mayoritariamente aumenta en la taquilla de los cines.
En abril, el diario Business Insider habló con varios empleados de Pixar (propiedad de Disney) que estaban “desmoralizados” porque estas últimas películas animadas ni siquiera pisaron los cines y fueron directamente a la plataforma televisiva.
Así fue el caso de Scarlett, quien asegura que perdió cerca de 50 millones de dólares debido al estreno simultáneo de Black Widow en las salas de cine y en la plataforma Disney+.
El conflicto inició debido a que, en el contrato, las ganancias que se recaudaran a partir del estreno de la cinta en la plataforma no serían beneficiarias para la actriz. Así, nuestra viuda negra encontró un espacio para expresar su descontento con la jugada de Disney y demandó a la productora por su movida en el lanzamiento.
Respecto a ello, Disney declaró que encuentra a esta denuncia “especialmente triste y angustiante” debido a la indiferencia que presentó la actriz a los efectos que produjo la pandemia. Aunque, ¿Scarlett es la verdadera villana?