Claudio Barros - cbarros@losandes.com.ar
Está ahí. Querés seguir haciendo lo que hacías pero no podés. Está en el medio de la pantalla, brillando y con una sola opción: aceptar. El tan temido cartel de “No hay suficiente espacio de almacenamiento” evidencia que por más avance tecnológico que haya en nuestro teléfono también hay un límite.
Fotos que no se hacen, archivos que no se guardan o aplicaciones que no se actualizan son algunas de las consecuencias de una memoria insuficiente en el smartphone. Como todo en la vida, terminamos valorando lo que teníamos una vez que lo hemos perdido y con los celulares surge la ironía de recordar lo importante que es tener memoria.
Si ya probaste con gritarle a la pantalla pero el teléfono sigue sin obtener suficiente espacio de almacenamiento quizá haya opciones que te puedan ayudar. Para encontrar una solución primero hay que identificar el problema y no es tan complicado: lo que más lugar ocupa son las imágenes y videos.
Con cada actualización de equipo viene una cámara mejorada pero el precio de la calidad lo paga la reducida memoria del teléfono.
Por eso es bueno tener a mano herramientas para hacer copias de seguridad. Una de las más clásicas es Dropbox: ofrece 5GB gratis de almacenamiento y regala 500mb extras por cada amigo que abre una cuenta allí a través de nuestra recomendación. La app fue mejorando y se integra cada vez mejor para guardar información en forma personal o compartida con otros.
Otra gran ayuda en la nube es Google Fotos. Su almacenamiento es gratuito e ilimitado si no pretendemos guardar en súper calidad ultra HD. Pero no sólo es un simple acumulador de imágenes sino que también ofrece organizar las imágenes o incluso borrar las que están repetidas en el equipo y ayudar a liberar espacio.
También para la cartera de la dama y el bolsillo del caballero está One Drive, la nube de almacenamiento de Microsoft. Ofrece 15GB de almacenamiento gratuito y los que tienen una suscripción de Office 365 elevan la cantidad a 1TB de capacidad. Hay más opciones y todas funcionan en forma similar: cierta cantidad sin costo y luego planes para ampliar la capacidad.
El otro inconveniente es que el smartphone no sólo se llena con el contenido que generamos sino también con el que recibimos. Sí, a vos te hablo WhatsApp. Esta aplicación es la puerta de entrada a mucho contenido -casi siempre tan divertido como inútil- que olvidamos eliminar y que termina en un rincón del sistema ocupando lugar valioso.
También para esto hay solución online. Tanto el contenido multimedia como los mensajes pueden tener una copia de seguridad en Google Drive y eliminarse del dispositivo. Sólo hay que entrar a la configuración de la aplicación y habilitar la opción que, incluso, puede hacer un backup automático en forma periódica.
Sin embargo la gran herramienta a utilizar es el sentido común. Es una aplicación muy sencilla que nos ayuda a darnos cuenta de que el teléfono funcionará mejor si desinstalamos las aplicaciones que no usamos, si borramos las 500 fotos repetidas que hicimos hasta lograr una buena o si eliminamos los archivos de WhatsApp que no necesitan pasar a la posteridad.
La mayoría de los equipos posee entre 8GB y 16GB promedio de memoria y aumentar la capacidad no siempre es la mejor solución porque el espacio de almacenamiento del teléfono se parece al placard de casa: mientras más grande es, más cosas le metemos.
Quizá lo más útil sea moderarse en la generación de contenidos para no saturar el equipo día por medio. Irónicamente sólo cuando tenemos memoria tendemos a olvidar que los espacios son limitados.
