Hace unos días se conoció la noticia que había duraznos en conserva chinos en las góndolas mendocinas; gran revuelo, el sector salió de su letargo, protestas de industriales y productores, indignación, rechazo, ataques a la empresa que los importó, amenazas, controversias. El gobierno provincial reaccionó reclamando al nacional.
Todos de acuerdo en lo negativo de la situación y los perjuicios que le causa a la provincia, única productora de duraznos industria en el país.
Seguramente se tomarán medidas, el momento pasará y en unos días el tema estará olvidado.
Habremos resuelto el problema del árbol. Mientras tanto en el bosque pasan cosas;
-La superficie de producción se concentra cada vez más en el Valle de Uco
-El 86% del volumen de materia prima para la industria se produce allí
-Según el IDR, este año la producción media de la zona es de 26 Ton / ha (si se despeja la superficie del programa DURAZNO 2025, es de 20 Ton/ ha).
-El 35 % de los montes tiene 16 años o más
-La tasa de replante y reposición es muy baja, sólo el 11 % de la superficie tiene 4 años o menos
-No existen créditos accesibles para la inversión en nuevas plantaciones.
-No se incentiva la vocación en los productores para continuar con este cultivo.
Por otro lado, se está desarrollando el programa DURAZNO 2025, de gestión técnica en montes tradicionales, con lo que se han logrado aumentos en productividad del 43 % promedio. También se está implementando el programa INNOVAFRUIT, un modelo innovador de alta tecnología para realizar nuevas plantaciones, con el que se logra precocidad y muy alta productividad. El problema del bosque es la productividad.
Es lo que afecta directamente a la competitividad del sector. El negocio de duraznos industria (conservas y pulpas), es un negocio de commodities, en donde la competitividad se da por costos.
En los duraznos en conservas el 33% del costo de producción lo representa la fruta. En pulpas la materia prima es el 75% del costo. La productividad es muy baja, sumado a la ineficiencia productiva, eleva los costos unitarios de producción de fruta, e incide directamente en el costo de producción de conservas y pulpas.
La competitividad está afectada por dos tipos de factores. Factores exógenos (tipo de cambio, aranceles, regulaciones, impuestos, costos laborales, inflación, economía internacional, etc.). Factores endógenos (eficiencia productiva, costos de producción, mecanización, escala, costos fijos, obsolescencia de variedades o maquinaria, métodos de cultivo, etc.).
Sobre los primeros (por ej. ingreso de duraznos chinos) no tenemos gobernanza. Sobre los segundos sí. Lo que hagamos o no depende de nosotros. Quizás en un tiempo breve, exista una negociación bilateral Argentina – China y en la mesa estén los derivados de la soja y los duraznos en lata. ¿Qué podrá suceder? ¡Qué podrá hacer el sector para evitar que suceda? Si avanza el acuerdo Mercosur – Unión Europea. ¿Qué podremos hacer para evitar que ingresen duraznos griegos?
Si nos concentramos en los factores endógenos, tendremos mucho por hacer, y depende de nosotros, de nuestras capacidades y fortalezas, de nuestras condiciones naturales muy favorables para el cultivo del duraznero, de nuestros productores y técnicos, de nuestra capacidad industrial, de las mejoras en la eficiencia productiva agrícola e industrial de nuestra vocación por consolidar y hacer crecer el negocio. Quizás en un tiempo cercano, el bosque genere otro árbol: habrá que importar duraznos chinos porque Mendoza no puede satisfacer la demanda nacional.
*El autor es Ingeniero Agrónomo.
