Hace por lo menos 10 años que se intenta poner al Bag in Box como una opción popular para el consumo. Si bien tuvo algún tipo de impulso por parte de organismo oficiales a partir del 2015, lo cierto es que su desarrollo ha sido errático.
No obstante, en el 2021 mostró un crecimiento del 19% en el mercado de vinos, y con el primer semestre cerrado de 2022 la cifra sigue en aumento. De hecho, creció en ese periodo 7,6%.
Referentes aseguran que hay varias razones por las que este envase, aún incipiente, representa sólo el 0,2% de los despachos, pero que podría terminar por imponerse.
Tras la pandemia, los consumidores están dispuestos a probar nuevas opciones. Entre ellas, el vidrio no parece ser el único envase aceptado para tomar un buen vino.
Las bodegas también han hecho su parte, colocando dentro de estas cajas productos de buena relación precio calidad. Muchas de ellas en términos de precio, la presentan como cuatro botellas al valor de tres, que en tiempos de inflación y salarios magros, genera un atractivo extra.
A fuerza de buenos productos se ha podido despegar de la “fama” del multilaminado o del vino en cartón, y se ha dado paso a nuevas experiencias. Otros atributos son evidentemente la comodidad para almacenarlo y también el hecho de que conserve mejor el producto.
Pese a esto, son pocas las bodegas que ofrecen ese segmento, pero ya se sabe que este semestre se sumarán nuevas competidoras, con gran poder de fuego, que pueden llegar al punto de venta directo apalancado por otros productos de su misma compañía.
Quedará ver si está es la palanca que necesitaba el envase para poder despegar y ya convertirse en una opción seria.
Todavía en Argentina se consume más vino en damajuana que en bag in box, por lo que el camino parece ser más largo de lo esperado.
El producto ha tenido apalancamiento en la industria, pero no despega. Falta desarrollo masivo para conocer la propuesta que, por supuesto, trae también desafíos.
Por su parte, el vino en lata este año está teniendo algunas graves caídas, mientras el bag in box crece. Resta esperar para saber si ésta es la oportunidad para lograr que finalmente se instale en los eventos sociales, entre los más jóvenes y también los más tradicionales.