“La cosecha tuvo muy buena calidad. Me tomé el trabajo de ir a recorrer las bodegas –en Mendoza y San Juan- y aproveché para hablar con los enólogos para ver cómo veían la uva; sobre todo en Mendoza, porque llovió mucho y pensábamos que podía haber botrytis. No la hubo y eso ya marca una calidad importante, que permite tener un buen piso para pensar en la comercialización”, señaló el presidente del Instituto Nacional de Vitivinicultura (INV), Martín Hinojosa.
Para el funcionario se trata de una buena cosecha que abrirá oportunidades. Pero advirtió que también se debe mirar afuera, ya que en el hemisferio norte hubo heladas significativas, sobre todo en Francia, y “aún no sabemos cuál es el grado de afectación que tendrán”. Lo cierto es que Hinojosa cree que para la vitivinicultura argentina se abrirán oportunidades para ganar mercados, no sólo de vinos a granel.
-El INV recibió críticas por la estimación de cosecha ¿Cómo han tomado estas críticas y a qué se debió la imprecisión?
-La estimación se hizo a través de varias entidades con las que trabajamos en conjunto (Acovi, INTA, las universidades, el INTI y los centros de desarrollo vitícola). Todos concordamos en un mismo número. Desde el 15 de febrero, cuando dimos a conocer la estimación, no hubo tormentas graniceras que se llevaran parte significativa del volumen. Por otro lado, la lluvia fue a parar al grano, no hubo afectación de botrytis (que achica el grano y pesa menos); eso también generó más kilos.
- ¿Tienen pensado seguir brindando la estimación de cosecha?
- Por supuesto y la vamos a seguir mejorando. Vamos a seguir trabajando con las instituciones que nos vienen acompañando. Antes, este trabajo lo hacía sólo el INV y ahora hay muchas más hectáreas censadas.
-El Gobierno de Mendoza,por medio del Banco de Vinos, hizo una estimación y se habló de un posible sobre stock. ¿Cuál es la situación de los stocks vínicos hoy?
-Los números que tiene la provincia son los que aportamos nosotros. Soy cauteloso y me gustaría que el gobierno también lo fuera. Cuando escucho que el gobierno dice que sobra vino tinto me preocupa, porque lo que sobra es blanco. No sé si esto se da por desconocimiento o por falta de trabajo en conjunto. Me parece sumamente importante que los fondos que son provinciales sean bien utilizados.
No estoy en contra del Banco de Vinos, porque me parece una buena herramienta, pero esperaría a ver cómo se desarrollan las ventas y las exportaciones para hacer un cálculo más objetivo.
-Analizando los números, ¿el INV no considera que haya una situación de sobre stock?
-Creo que es apresurado decir que hay sobre stock y que necesita más rodaje. Si hubiera sobre stock se hubiera desplomado el precio del vino a granel y eso no ha ocurrido.
-El año pasado el mercado interno mostró señales de recuperación, pero en 2021 muestra algunos números negativos. ¿Cómo ven los nuevos pedidos de despacho?
-El año pasado se vivió una situación particular. Se suspendieron algunos pagos, la gente se quedó en su casa y destinó todos sus ingresos al consumo. Este año es distinto y eso afecta claramente al mercado interno. La caída hasta ahora es del 6%, que parece poco, pero en un mercado tan fuerte, es un número significativo el 6%.
-En 2020 se exportaron grandes volúmenes de granel y este año han caído los envíos. ¿Piensan que puede haber una recuperación comercial?
-El mercado de granel es ‘infiel’. Se maneja por precios y con cantidades de otras cosechas. Vemos que en el hemisferio norte hubo una afectación importante a causa de las heladas y pensamos que puede haber una oportunidad de ingreso para los vinos argentinos. Superar los volúmenes de despacho de 2020 va a ser difícil, pero aspiramos a que sea mejor que 2019.
-¿Cómo ve el Malbec entre los fraccionados?
-Más de la mitad del volumen de vino que se exporta es Malbec. El miedo que teníamos en la industria de que fuera una moda, como le pasó a Australia con el syrah, por suerte con el Malbec no nos pasó. Ya llevamos muchos años de gran demanda. Es un vino que cae bien en el gusto del norteamericano.