Después de las limitaciones que impuso la pandemia, la Fiesta de la Ganadería recupera su fecha tradicional de celebración, en mayo, y el remate ganadero volverá a realizarse sin restricciones y con presencialidad plena. Se espera que se ofrezcan unas 2.500 cabezas y que venga un buen número de compradores para llevarse los terneros mendocinos para el engorde en otras provincias. El precio superaría, estiman, los $ 400 el kilo. Desde el sector ganadero celebran que también repuntó el valor de la vaca de descarte.
Omar Bello, quien con su hijo Emiliano es representante de la empresa San Luis Feria, explicó que vendrían unos 15 a 20 compradores, que tienen campos en otras provincias y llegan al sur mendocino atraídos por la fiesta y, de paso, participan del remate y compran. En cuanto a la oferta, indicó que habrá desde terneros livianos, de entre 80 y 120 kilos, a otros que alcancen los 180. Pero que también se rematarán vacas y toros viejos.
El precio del gordo, explicó, siempre depende del valor del maíz y la soja, porque los productores locales les venden los terneros a otros de La Pampa, Córdoba, Buenos Aires y San Luis, que tienen feedlots importantes, en los que engordan los animales, y son quienes fijan los valores. En ese sentido, indicó que, cuando el precio de esos commodities sube, los ganaderos que se dedican a la cría reciben mejor pago. “Cuando la soja tiene buen precio, la hacienda tiene buen precio”, resume.
Sobre los precios, comentó que el del ternero varía según la cantidad de kilos que tenga, pero ha rondado los $370 a $380 en los últimos remates y el liviano pasó a los $400 e, incluso, han llegado a lograr $500 el kilo. Y la vaca, según el estado, se puede vender a $140 o $150 si está muy flaca, o llegar a los $200 si se encuentra en buenas condiciones.
Bello recordó que, cuando se cerraron las exportaciones, el kilo de estos animales de “descarte”, que se envían a China, cayó de los $120 a $60 u $80, lo que implicó que muchos productores dejaran las vacas viejas en el campo, porque apenas alcanzaban a cubrir el gasto en combustible para sacarlas. Es que en un camión se pueden cargar alrededor de 100 terneros, pero no más de 35 a 40 vacas. Sin embargo, ahora, con la reapertura de las ventas al exterior, el precio trepó y ya resulta conveniente volver a venderlas, pese al aumento en los combustibles.
El productor ganadero indicó que, además de vender la producción local, en octubre del año pasado, cuando se hizo la última Fiesta de la Ganadería (la fecha se trasladó por la pandemia), también se trajo algún toro reproductor y vaquillonas puras, de pedigree, con garantía de preñez, de diferentes razas, como Angus negro y colorado, o Bradford, que se adaptan muy bien a los campos mendocinos. Y lo mismo sucederá este fin de semana.
En octubre, agregó, se vendió toda la invernada y algunos ganaderos mendocinos compraron toros reproductores, que pagarán ahora con terneros. Bello destacó que es una alternativa para que el productor pueda conseguir animales de buena calidad, lo que ha ido permitiendo mejorar la hacienda en Mendoza. De hecho, recordó que, en el pasado, el rodeo mendocino no era bien visto, porque los ganaderos simplemente elegían un ternero “bonito” como reproductor, mientras, de a poco, se ha ido priorizando la genética.
Bello explicó que, si bien durante la pandemia se siguieron haciendo remates, se cambió la modalidad de venta y se retomó el antiguo método de que el martillero fuera corral por corral, en una camioneta, para evitar que la gente se concentrara en un solo lugar. Ahora, con la eliminación de las restricciones, se volverá a contar con una tribuna y la hacienda irá nuevamente a la pista.
Ejemplares de calidad
Por su parte, Carlos Pinto, representante de Aguirre Vázquez, otra empresa que traerá compradores el remate, resaltó que, para la subasta de la Fiesta de la Ganadería, le gente suele traer los mejores animales. Unos tres meses antes, detalló, los productores van viendo el lote y reservan terneros a los que alimento un poco mejor, para que estén en óptimas condiciones.
Pinto señaló que los precios de la hacienda han mejorado mucho y que hoy un kilo de ternero no se vende por menos de $400, cuando dos años atrás, estaba a $180 a $200. Y consideró que esto se debe, en gran parte, a que se volvieron a abrir las exportaciones y a que los valores de los productos del campo, como soja, trigo y ganado, están en un buen momento. De la mano de esto, también destacó que la vaca vieja se está enviando a China a unos $240 a $260 el kilo, mientras el novillo gordo ronda los $320 o $330.
El productor comentó que esta temporada les ha tocado buen tiempo, con lluvias, y que se ha podido producir más y mejorar la hacienda, porque cuando los años son buenos, los productores se compran un buen toro o vaca para impulsar el rodeo. Y que hace unos tres años que las condiciones con favorables, después de otros de sequía que provocaron la muerte de muchos animales y que hubiera que malvender los que se habían salvado, lo que complicó después la reposición.
En Mendoza, detalló Pinto, se cría el ternero hasta que alcanza unos 130 a 140 kilos. Algunos productores, que tienen campos bajo riego con pasturas o feed lot, los engordan en la provincia, pero la mayoría los vende para que los lleven a otras partes del país para su terminación. Y empresas, como la que él representa, se encargan de traer posibles compradores a los remates, para que se lleven la hacienda; también, de que lleguen algunos lotes, de toros o vaquillonas de cabaña, para que los mendocinos puedan mejorar su rodeo.
La fecha elegida para la Fiesta de la Ganadería, explicó Omar Bello, se hizo coincidir con la época del destete, para sacarle el ternero a la vaca antes de que llegue el invierno y de que las heladas y el viento arruinen las pasturas nativas de los campos.