Apuntalar lo que tiene de la casa, al parecer, es la idea de Gabriel Gómez para armar el plantel de la próxima temporada. En ese sentido, ayer el entrenador, que aún no fue oficializado al frente del primer equipo de Independiente Rivadavia, se reunió con los jugadores y les comunicó quiénes seguirán y aquellos que deberán buscar otros horizontes. “Nos presentó una propuesta y no hay diferencias para no pensar en su continuidad”, dijo el presidente de la Lepra, Ignacio Berrios, con respecto al futuro del DT. “Mañana (por hoy), se termina de definir”, agregó.
Según pudo averiguar Más Deportes, Gómez necesita una base importante del plantel que logró la permanencia en la B Nacional, entre los que se destacan: Aracena, Rébola, Rodríguez, Maidana, Negri y González, a quienes se les termina el vínculo a fines de junio. A esos apellidos hay que sumarles los de Navas, Lucero, Méndez, Disanto, Villarreal, Irañeta, Sánchez y Céliz (con contrato hasta 2019) y los lesionados Guerra y Barrera. En total son 21 los vínculos que finalizan el próximo mes y, desde ayer, la dirigencia leprosa trabaja en lograr la continuidad de las prioridades solicitadas por el técnico, como así también ya empezaron a barajar los nombres que Gómez necesitaría para afrontar la competencia que se iniciará en agosto. En ese sentido, el mandamás de Independiente, nos adelantó: "Sabemos que necesitamos un defensor central más -o dos-, un volante de contención, dos delanteros y un segundo arquero".
En otro orden Berrios manifestó que uno de los síndicos que lleva adelante la convocatoria de la institución ya se encuentra trabajando en lo referido a las elecciones. “Queremos que sean el 15 de julio. Nosotros tenemos un grupo que fue aprendiendo y que está dispuesto a seguir trabajando por el bienestar de la institución. Estamos trabajando en el armado del presupuesto y viendo posibles sponsors que se pueden sumar”.
Por último, al ser consultado sobre el rumor de que Agustín Vila (ex presidente) podría volver a acercarse al club, Berrios, dijo: “Se habló en su momento, pero él estaría interesado en colaborar con obras que, en definitiva, son cosas que quedan a futuro y que no son pasajeras como puede ser aportar para armar un equipo competitivo”.
Meten presión en las redes para la nueva categoría
Desde hace tiempo se viene hablando que la B Nacional tendrá una división en zonas Metropolitana e Interior, con 18 ó 20 equipos cada una. El rumor, por ahora es sólo eso, está instalado hace bastante tiempo pero, por ahora, nadie había salido a hablar hasta hoy. Una serie de tweets de Daniel Ferreiro, dirigente de Nueva Chicago y vocero del presidente de la AFA, Chiqui Tapia, da una señal inequívoca de que algo cambiará.
“La B Nacional. En las próximas 4 temporadas de la Superliga descenderán 8 equipos (con 35% más de Presupuesto), ascenderán del Federal y la B 16 equipos. Todos sin promedios. Los equipos que sostienen la categoría, sin reforma, no pueden competir más de esta manera injusta y no equitativa”, fue el primer mensaje que llamó la atención.
“En la última temporada de los 4 que descendieron de la Superliga con más recursos, 1 salió campeón y 2 entraron al octogonal. De los que ascendieron 3 mantuvieron la categoría y sólo descendió el equipo que venía con una penalidad. Este sistema desangra a los clubes históricos”, publicó a continuación haciendo un pedido urgente.
“Este escenario hace que los equipos de la BN no puedan competir contra ascendidos y descendidos (con más recursos). Sólo la B Nacional )y sus equipos tradicionales) paga el error histórico del torneo de 30. Un descenso deportivo se convierte en descenso institucional y quiebra irreversible”, llegó después este escenario más apocalíptico.
A eso, se sumaron entonces rápidamente algunos otros dirigentes de clubes metropolitanos.
“El torneo Nacional B ¡debe ser reestructurado YA! Es inviable desde lo económico e injusto deportivamente. Los clubes metropolitanos competimos en desigualdad de condiciones y esta situación se agrava año a año”, aseguró Oscar Fernández, presidente de Los Andes.
Mientras, Diego Lis, titular de Villa Dálmine, agregó: “Como hemos dicho desde la mesa de la categoría en varias oportunidades el torneo de la B Nacional es inviable desde donde se lo mire. Se necesita una restructuracióon urgente para que no se transforme en una sangría de los que militamos en ella”.
Recordemos que hasta hace muy poco, la reestructuración no se había analizado en el Comité Ejecutivo. Pero ya hace unos días ‘Chiqui’ Tapia, mandamás de la AFA, confirmó que hay un proyecto que se debatirá a fondo una vez que finalice el actual torneo. Y sí, es el borrador que contempla la creación de dos zonas -Metropolitana e Interior- conformadas con 20 clubes cada una. O sea una mega B Nacional.
Por su parte, Marcelo Achile -presidente de Defensores y miembro del Comité Ejecutivo-, integra la Comisión que analiza las reformas, confió que “venimos trabajando hace tiempo en la modificación. El actual certamen es una sangría por la cantidad de descensos e inviable desde lo económico. Buscamos consenso y equilibrio deportivo para no perjudicar a nadie”.
El plan, que fuera propuesto por primera vez a mediados de 2017, parece que finalmente verá la luz en breve. Además de la división en dos grupos, también se prevé que los clubes que culminen en la primera posición -uno Metro y otro Interior- asciendan a la Superliga. También se especifica que, a los fines de cubrir las plazas faltantes para completar el G 40, subirían a la máxima categoría aquellos equipos ubicados en las mejores posiciones en la temporada 17/18.
La clave, entonces, pasará por saber si en este mes se logra un acuerdo general y la aprobación final, puesto que la intención es que se ponga en marcha desde agosto. Y todo hace suponer que esta vez sí cantan las cuarenta.
