Por Claudio Barros - cbarros@losandes.com.ar
Seguro pensaron que les iba a hablar de las (malas) comunicaciones a la hora de llamar por celular ¿verdad?, pues no, al menos no ahora.
Sin embargo compartiré algunas de las opciones que incluyen el uso de la voz, un smartphone y no tiene nada que ver con una llamada telefónica.
En un giro irónico del destino digital casi olvidamos que los teléfonos celulares se usan para hablar con personas y los destinamos a mensajes de texto y de voz. Sin embargo ahora volvemos a usar la voz pero para hablar con un software. Es más frio e impersonal que nuestra familia o amigos pero mucho más rico en información y servicio.
Al menos eso dicen las estadísticas de uso. "Más de 20% de las búsquedas de Google se hacen por voz y estamos en un momento clave para la inteligencia artificial. Daremos un paso decisivo de cara a los próximos diez años", dijo Sundar Pichai, CEO de Google, el miércoles pasado cuando la empresa que dirige presentó dos nuevos productos. Lo cito porque el dato que comparte es esencial y para mostrar que no soy el único que lo ha notado.
Ustedes también, como yo, lentamente se van rindiendo a las opciones de hablarle al teléfono como si fuera una persona. Los que tenemos iPhone lo empezamos a hacer con Siri y los que usan Android saben que Google Now está para escuchar cualquier duda que surja. ¿Lo han probado? Google Now ofrece en Mendoza mejor servicio que Siri. La razón es sencilla: en nuestro país no hay mucho servicios ligados a Apple y la oferta de servicios de su asistente de voz es menor.
Hablar también es una opción que reemplazó a escribir en el pequeño teclado del teléfono y no me refiero a la opción de enviar audios por WhatsApp. Antes que esa función ya estaba disponible el dictado por voz tanto en Android como en iOS y pocos lo usan. Suele estar en una tecla al costado de la barra espaciadora y al presionarlo "graba" nuestra voz y la transforma en un texto. Ideal para los que argumentan que mandan audio porque les da fiaca escribir.
Ahora se suma al panorama Google Home y Google Assistant, dos opciones que reconocen la voz del usuario para funcionar. Pueden hacer reservas en un restaurante, poner música, apagar las luces y mandar a imprimir todo con solo hablarles. No hay nada nuevo aquí -Echo de Amazon ya hace tareas similares para el hogar- excepto que es la nueva veta comercial tecno.
Hablar para hacer es una tendencia creciente y Argentina no está exenta, aunque sí un poco retrasada. También nuestro particular voceo hace que los asistentes de voz no nos comprendan del todo pero hay progresos día a día sobre todo si hablamos claro, porque parece una perogrullada pero los asistentes reconocen el castellano como lengua y quizá no entiendan mucho cuando intentemos decir "Hola ameo, ke ase guachín".
Te escucho
Pero el problema de fondo no es que el dispositivo no nos entienda sino más bien cuánto escucha. Hace un tiempo atrás un nuevo modelo de smart TV de Samsung generó polémica porque en sus nuevos mandos de voz para controlarlo advertía que podía enviar datos personales a terceros si se hablaba de eso delante del televisor. Lo mismo pasó con la muñeca Barbie que se conecta a internet. La novedad es que interactuaba con los chicos si le hablaban, lo malo es que también podían guardar la información y compartirla con empresas.
La lucha entre privacidad e innovación todavía está en una zona gris en la que lo único que brilla es la luz del asistente de voz esperando escuchar alguna orden.
