A los 74 años, tras una dura enfermedad, el polémico ex banquero Raúl Moneta murió en Buenos Aires.
Fue una activa personalidad que sobresalió durante la segunda mitad del menemismo, época en la que participó de numerosos procesos de privatizaciones de empresas y entidades financieras, como los bancos Mendoza y de Previsión Social.
Una especie de "capitalismo amigo", es decir, aquellas personas que viven de sus contactos con el Estado para hacer negocios y multiplican exponencialmente sus fortunas.
En los últimos tiempos, Moneta estuvo en los medios de comunicación debido a que formó parte de la causa judicial por la compra de la imprenta Ciccone Calcográfica, que llevó finalmente a la cárcel al ex vicepresidente Amado Boudou.