Sufrir y gozar con igual intensidad. No habrá en el mundo Lepra dos sentimientos que expliquen mejor la pasión con que se viven los partidos del lado Sur del Parque General San Martín. Se puede fallar en el pase final, pero siempre con el cuchillo entre los dientes.
Noventa minutos de sufrimiento, plagados de imprecisiones y desorden se pagan con un gol sobre la hora, agónico, con el vuelo interminable de Yair Marín para conectar un centro que empujaron desde los cuatro costados del Bautista Gargantini. En el espejo retrovisor queda Brown de Madryn y la próxima estación es Bahía Blanca, con un Olimpo necesitado de puntos para no perder la categoría. A todo o nada; justo como más le gusta a este equipo de Gabriel Gómez.
Las prisas no son...
Buenas consejeras. La Lepra, pensando en sus chances de meterse en el Reducido, aceleró más de lo aconsejado en todo momento y perdió precisión en los metros finales.
Durante esos primeros 45’ se repitió en movimientos y errores y se hizo previsible para el rival, que se cerró bien, intentó darle buen destino al balón y casi nunca se salió del libreto pensado.
La intención de juntar a Castro y Tissera para tener velocidad en los metros finales no funcionó; fallaron los volantes y los pelotazos fueron una constante para intentar resolver de mitad de cancha hacia adelante. Encima, Brown daba buen destino al balón con Velázquez, Parisi y González, poniendo en discusión la posesión de la redonda y provocando al local un enorme desgaste (físico y emocional) en la búsqueda de controlar el juego.
Con los nubarrones amenazando un futuro de tormentas, Independiente Rivadavia intentó cambiar en el complemento y decidió darle salida limpia al balón. Sin embargo, el rival presionó muy bien esa salida y la desprolijidad se apoderó de los hombres locales.
Gómez movió el banco en la búsqueda de darle más verticalidad al equipo, aunque lo consiguió a medias. Era palo y palo, con algunas chances sobre las áreas pero demasiado luchado en el mediocampo. El DT había anunciado en la semana que "con 7 puntos más estamos dentro del Reducido" y el mensaje desde el banco fue ese: "a matar o morir". Y nunca, jamás, hay que dar por muerto a este equipo que terminó ofrendando a la tribuna los tres puntos. Desde ahí, desde estas estructuras que todo lo ven, bajaba la bendición: "Arriba la Leee...".
Una excelente iniciativa
La dirigencia del club del Parque tuvo una excelente iniciativa ayer. Los niños que forman parte de la escuelita de fútbol de la Fundación Notti fueron invitados a ingresar con el plantel a la cancha. Una medida simple que le arrancó una sonrisa y un gran momento de felicidad a los más pequeños.
A San Luis por la Copa
Por los 32avos. de final de la Copa Argentina, Independiente Rivadavia jugará ante Ferrocarril Midland, que disputa la Primera C Metropolitana. El encuentro será el próximo 23 de abril, en el estadio La Pedrera, en Villa Mercedes, San Luis. Res definir el horario.