“Los argentinos han inundado la capital regional superando con creces el pronóstico esperado en torno al arribo de viajeros” dicen desde la Municipalidad de La Serena. Es que, aseguran, no se veía tanto turista extranjero desde 2007. Dados los desastres naturales de setiembre de 2015, la urbe temía que a los de este lado les mermaran las ansias de reencontrarse con el Pacífico. Sin embargo mendocinos y sanjuaninos encabezan el top five de visitantes a la región de Coquimbo. La apertura del cepo que evita malabares para comprar moneda y la excelente relación de precios-calidad para casi todos los productos y servicios que se pagan con tarjeta de crédito o cambiando dólares por pesos chilenos in situ, movilizó a los compatriotas, porque también llegan a esas playas gente de Córdoba, Buenos Aires y Rosario. De hecho, “Chile experimentó un 45% más de argentinos en la primera semana de enero comparado con el mismo período del año pasado y eso es verdaderamente importante, señaló Roberto Jacob, edil serenense. En relación a los resquemores por el terremoto de hace unos meses, expresó que La Serena no tuvo mayores problemas, la playa está espectacular y los visitantes lo han podido comprobar”.
Un enero a todo vapor
De cara a la última semana del primer mes del año, la Avenida del Mar –con más de 5 kilómetros de playas habilitadas- se ve llena de colores y alegría, la gente disfruta de las extensas playas durante el día y de los bares y restaurantes por las noches.
Los mendocinos rescatan en la elección precisamente las arenas más amplias para tenderse al sol, hacer castillitos o jugar con los niños sin estar amontonados, además de la gran oferta de alojamientos con la que se encuentran. Por supuesto que las compras no son un detalle menor y todos los consultados hicieron referencia a ellas. Desde la vida cotidiana, ir al supermercado para comer en el departamento o casa alquilada, pasando por la nafta que está considerablemente más baja que en Mendoza y las tiendas del mall, “todo es conveniente”, afirman los que están de cara al mar por estos días. La tecnología marca gran diferencia y no hay quién no lleve algo de regreso a casa, pero la indumentaria como el calzado también muestran notables distinciones de precio respecto a nuestra provincia. Zapatillas, ropa deportiva e insumos para el colegio, continúan la lista de lo más comprado.
Pero La Serena brinda muchas alternativas para sacar el jugo al verano. Así lo afirma Jorgelina, comprovinciana ella que dice, “paseamos, comemos rico y los últimos dos días pisamos el shopping, para no volvernos locos. Un paseo por la Feria del Libro, por el tradicional mercado del casco histórico y por sus callecitas, es plan para la familia.
Además en el centro hay tarifas y productos diversos, por lo que siempre hay que darse una vueltita”. Las mañanas son de caminata por la costanera, nos dice otra menduca. Compramos paltas y mariscos y después de almorzar otra vez a la playa. Por las noches salir no es caro, podés gastar $ 200 por persona y si comés algo rápido como hamburguesas o empanadas con cerveza o pizza, unos $ 100, depende de lo que hagás, nos indica.
Los más aventureros buscan además de sol y playa conocer algo de la zona rural y del Valle del Elqui. Los observatorios, hay tours a diario desde la ciudad, que conjugan pisqueras y restaurantes de montaña son de los más mentados (desde $ 15.000 chilenos). También la zona de Punta Choro e isla Damas, un lujito a pocos kilómetros.
Los que adoran los mariscos y las preparaciones típicas de la costa chilena no se quedan sin conocer Caleta San Pedro -distante a sólo 5 kilómetros de la ciudad- con una decena de ofertas en un amplio salón en donde las mujeres trabajan en cooperativa brindando auténticos sabores. Un almuerzo para 4 comensales, (empanadas, plato principal, bebida y un vino), cuesta alrededor de $ 27.000 ($ 563 argentinos, $ 38 dólares).
En cuanto a las demoras en el paso Cristo Redentor, Andrés dice que él y su familia están “resignados. Sabemos que habrá cola y nos preparamos para eso. Comida y bebida fundamental para los chicos y también juegos, para que no te sequen la cabeza con el ‘papá cuándo llegamos’”. En tanto Franco cuenta que este año eligió Agua Negra. “Tenía algo de temor por la altura y el estado del camino, pero no tuve inconvenientes y el paisaje es precioso”.
La noche está estrellada y muy movida
Cuando el sol comienza a despedirse y las pieles piden descanso, los churros, las empanadas y las cervezas acompañan el regreso a la casa vacacional. Más tarde, además de los restaurantes con excelente nivel, son los pubs los que atraen a los más jóvenes. Karaoke, locales más estilo under o de música electrónica, abundan cerca del mar. Kamikaze sigue siendo tendencia como los after beach en el local del casino en la playa. Los que van en grupos de amigos comen algo y salen, el resto pasa algún tiempo con la familia y se despega para ir con sus pares a tomar algo. Las previas, pueden ser en la playa o en algún departamento. “El Fernet lo traemos de Mendoza, dice Nacho”.
Otras alternativas
Las noches de bulevar, toman el centro serenense, espacio donde pub y restaurantes sacan sus mesas a la calle e invitan a los transeúntes a degustar sus productos y disfrutar de diversos números artísticos.
Este año, al Festival de Teatro se suma el Festival de Mimos, realzando las artes escénicas con diversas presentaciones que involucran a toda la familia y que incluye la presentación de numerosos artistas locales, regionales y nacionales.
Conciertos de música popular, noches de tango y folclore en plena Avenida del Mar y Plaza de Armas (plaza central) de la ciudad, y la celebración de la XXXI Feria del Libro, también forman parte del verano.
Para los que van en febrero, al Festival La Serena 2016, pueden asistir a un show completamente gratuito, que incluye, música, humor y belleza. Este año, el mega espectáculo se realizará el 5 y 6 de febrero. Para los inquietos, tours nocturnos por el cementerio municipal, donde descansan importantes figuras de Chile y diversas alternativas para recorrer y conocer el sector rural.
Todos los precios
Machas: el kilo está aproximadamente a $ 5.000, pero varía siempre. Por ejemplo ahora, producto de las marejadas no hay mucho, por lo que el precio sube. Lo recomendable siempre es comparar, ya que se encuentran en algunos sitios a $ 3.500 y otros puestos los tienen a $ 8.000. ($ 5.000 = $ 105 argentinos o U$S 7 aproximadamente).
Congrio: es un pescado de élite así que su precio está rozando los $ 6.000 ($125 pesos argentinos, U$S 8,5).
Camarón: el kilo unos $ 8.000 ($ 166 argentinos, U$S 11)
Reineta: el kilo $ 6.000.
Salmón: como es del sur, acá sólo se consiguen en supermercados, congelados. Aproximadamente a $ 3.500 dos trozos medianos la bolsa (73 argentinos, $ 5 dólares aproximadamente). Para 6 comensales hay que comprar 3 bolsas ($ 11.000 a $ 12.000 chilenos, $ 250 argentinos, U$S 17).
Hamburguesa: una en Mc Donald's o locales similares, la más básica con queso $ 1.200 ($ 25 argentinos, U$S 1,68). Un combo completo, con bebida, papas, empanaditas de queso, etc., ronda los $ 3.500 ($ 73 argentinos, 5 dólares aproximadamente).
Leche: no se consigue en sachets, sólo en caja larga vida o en polvo. (1 caja $ 700, $ 15 argentinos, U$S 1)
Mantequilla: $ 700 por 100gr., $ 1.200 por 200.
Palta: palta Hass $ 3.500 el kilo ($ 73 argentinos, unos 5 dólares)
Coca Cola: en supermercados 1 1/2 $ 1.100 chilenos ($ 23 argentinos, 1,55 dólares).
Restaurantes. Por ejemplo un plato en un restaurante en plena avenida del Mar cuesta aproximadamente $ 7.000 ($146 argentinos, 10 dólares) ya con bebida, jugos naturales o vino sube a $ 9.000 $ 187 argentinos, 12,50 dólares). En el centro de la ciudad, en buenos restaurantes se puede encontrar el menú ejecutivo, es decir un almuerzo completo (entrada, plato principal, postre y a veces, bebida) desde $ 3.500 a $ 4.000, $ 84 argentinos, 5,60 dólares)
El cambio si bien varía está a $ 1 argentino a $ 48 chilenos y el dólar a $ 715, aunque hay días que baja a 712 o sube a 720.
Alojamiento: desde $ 45.000 para 4; en el borde costero $ 55.000 para 2 y $ 75.000 para 4.
