Argentina culminó su participación en el Grupo B del Mundial U19 con derrota ante China por 74-49. Fue un partido cuesta arriba para nuestras chicas, que servirá para seguir evolucionando dentro de la élite.
Luego del mal trago ante la poderosa Bélgica y el día de descanso, la Selección U19 salió a jugar el último partido de la zona ante China en el estadio central del Thai-Japan. Al igual que en todos los partidos de la fase de grupos, a la Argentina le costó ingresar al duelo, sufriendo la altura de Mingling Chen en la pintura, y cargándose rápido de faltas en jugadoras importantes, quienes trataron de negar que el balón caiga en el poste. El ingreso de Victoria Gauna le dio aire fresco al equipo, que a pesar de no estar bien del todo fino en ofensiva (pareció acusar físicamente los más de 30 grados), mejoró lo de los primeros minutos y cedió los primeros diez solo por 15 a 9.
El segundo cuarto lo empezó sufriendo, porque con una ráfaga de 7-2 China amenazó con escaparse. Una charla de Mariano Junco y el cambio de actitud en defensa trajeron sus frutos, debido a que con un par de apariciones de Gauna , “Las Hormigas” volvieron a la pelea. Este buen momento fue efímero, porque China reencontró ventajas alimentando a sus grandes (Minling Chen -192 cm- anotó 11 puntos en el período) en la zona pintada, y con canastas tan sencillas como indefendibles por la diferencia de talla, las asiáticas se fueron al entretiempo ganando 34-22.
La vuelta del descanso largo fue devastadora: China, fiel a su libreto, continuó sacándole provecho al juego en las cercanías del aro, tomando rebotes ofensivos (19-8 en puntos de segunda oportunidad) y anotando desde las manos de Jiyuan Wan. Cuando Argentina ajustó en la pintura, las chinas respondieron con dos triples mentalmente fulminantes. Por otro lado, la ofensiva albiceleste -pese al buen parcial de Camila Suárez- estuvo lejos de ser aquella que se vio en el debut, y sobrecargando en algunas individualidades, no fluyó y quedó lejos del campeón asiático.
Con el trámite prácticamente consumado, la hidalguía de este grupo de Hormigas salió a relucir. Entraron al parquet a vender cara la derrota, pero se encontraron con un rival en estado de gracia; la variedad de recursos ofensivos (al excelente dominio en los tableros se le sumaron los triples de Yuan Li) que tuvo China a lo largo del duelo, hicieron imposible cualquier equivalencia. Con cuatro jugadoras en doble dígito, las de Asia vencieron a la Argentina por 74 a 49 en el cierre de la fase de grupos. Otro partido que servirá de aprendizaje para un equipo que continúa en formación y competencia, porque su Mundial no termina acá. ¡Arriba, Hormigas!