La final de la Copa Libertadores entre River y Boca genera una expectativa mundial y nadie quiere perderse una serie que será histórica. Tanto es así que en Rusia sospechan que la expulsión de Leandro Paredes, ex jugador xeneize y actual del Zenit de San Petersburgo, fue a propósito con el fin de poder presenciar el duelo en la Bombonera el próximo sábado (17 horas).
Durante el partido entre el Zenit y Ajmat. El volante pegó una patada desde atrás en la mitad de cancha innecesariamente y el árbitro no dudó en mostrarle la tarjeta roja. Paredes no podrá jugar el clásico ante el CSKA el próximo fin de semana y las especulaciones no tardaron en aparecer.
Los hinchas del Zenit comenzaron a tejer todo tipo de hipótesis sobre la expulsión de Paredes y acusan a uno de sus mejores jugadores de haber buscado la suspensión para tener el fin de semana libre y así poder viajar a Buenos Aires para ver a su querido Boca ante River.
La expulsión de Paredes llama la atención, ya que no es un jugador propenso a este tipo de situaciones y solamente vio la tarjeta roja en dos oportunidades.
En la previa al Superclásico, el futbolista publicó una foto con la camiseta de Boca abrazado a Sebsatián Driussi, compañero del Zenit y ex River, para dejar un mensaje de paz de cara al partido.
Por su parte, el jugador de la Selección Argentina aseguró: "Jamás me haría expulsar para ver a Boca. Soy un profesional. Tenía pasaje para el sábado, pero el Zenit me autorizó viajar antes", manifestó Paredes en diálogo con TyC Sports.
El ex volante de Boca (2010-2014) opinó que el Superclásico del próximo sábado será "un partido diferente a todos" que tendrá su correlato el sábado 24 en el Monumental con la definición de la Copa Libertadores.
"Ese Superclásico será histórico y ojalá la disfrutemos todos. La verdad me dan ganas de estar ahí, de jugarlo", concluyó Paredes.