Sonó el teléfono de la redacción y una señora exhultante decía: “Le voy a dar una primicia. Un mendocino está entre los ocho mejores del mundo. Se llama Jesús Lugones. Es mi nieto. No sabe la alegría que tengo”, casi al borde las lágrimas la abuela paterna nos acercaba la noticia de que Jesús había conseguido el sexto lugar en la categoría espada en el Mundial de esgrima, en Leipzig, Alemania.
“¿Cómo hace una abuela para manejar estas sensaciones?”, preguntaba. Lugones, de 25 años, ganador de la medalla de bronce por equipos en Panamericano de Chile 2015 y la de plata en Montreal, Canadá, venció en el torneo ecuménico al alemán Lukas Bellmann; al suizo Georg Kuhn y al japonés Koki Kano y cayó ente el húngario Andras Rredli, en cuartos de final.