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La catedral del secano lavallino se convirtió en un escenario colmado de fieles de distintas latitudes de la provincia de Mendoza, como así también de San Juan, Córdoba y San Luis para participar de la acostumbrada misa y procesión con la imagen de la “patrona religiosa”. La celebración central fue presidida por el obispo de Mendoza, Monseñor Marcelo Colombo y el padre Maximiliano Goytia, superior de la orden Redentorista de la parroquia Cristo Rey. Las celebraciones fueron organizadas por la Municipalidad y la Comisión de la Capilla del Rosario.
El obispo Colombo, que por primera vez presidió este festejo central, definió el lugar como un santuario por la gran convocatoria de peregrinos que atrae la Virgen del Rosario de las Lagunas.
A su vez, animó a los cristianos, a comprometer sus corazones, como la virgen María, en el servicio y la solidaridad para con el prójimo. Como cada año, se renuevan los encuentros de amigos y familiares que aprovechan la ocasión para compartir un fin de semana de acampe. Entre los atractivos que encontraron los visitantes, el museo de sitio de Lagunas fue el elegido para recorrer sus salas, donde se exhibieron reliquias de la actividad religiosa; recreaciones de los modos de vida y costumbres del antepasado huarpe, con la exposición de piezas en junquillo y cerámica.
Otro atractivo concurrido estuvo en el bordo negro, camino que se recorre para encontrar puestos de comidas típicas y acordes de tonadas interpretadas por cantantes lugareños y las infaltables parejas de bailarines, improvisando escenarios para desplegar la danza. Con la puesta del sol, las luces se encendieron para dar paso a los espectáculos folklóricos, en el anfiteatro natural dispuesto por la comuna. En la ocasión, brillaron en el escenario el Ensamble de Cuerdas Domingo Camalla, El Trébol Mercedino, Abelino Campos y el ballet de danzas.
La peregrinación gaucha
Un acto de fe que se repite desde hace más de 30 años es la peregrinación gaucha que convoca la advocación a la Virgen del Rosario de las Lagunas. La caravana concentró más de 80 jinetes que partieron el viernes desde la ciudad Tulumaya para recorrer 90 kilómetros a campo traviesa hasta el pueblo de Lagunas.
Los promesantes fueron recibidos en el pueblo de Lagunas por el director de Cultura, Turismo y Deportes, Carlos Acosta; el cura redentorista, Maximiliano Goytia y un número folclórico, a cargo del cantante Miguel Molina.
