El caso de Amir Nasr Azadani se volvió viral a fines del año pasado y provocó críticas en todo el mundo cuando asociaciones de futbolistas y medios internacionales anunciaron en diciembre que había sido condenado a muerte por protestar en su país a favor de los derechos de las mujeres.
En las últimas horas, se supo que el futbolista fue sentenciado a pasar 26 años de prisión por su complicidad en el asesinato de los tres basijis, a cinco por el cargo de reunión y colusión para cometer delitos y a dos más por ser miembro de grupos ilegales con la intención de perturbar la seguridad pública.
Las condenas las cumplirá simultáneamente, por lo que, en principio, pasará en prisión unos 16 años. El deportista fue imputado por “incurrir en delitos contra el orden público, reunirse y conspirar para vulnerar la seguridad del país”, además de cometer ‘moharebé’, “un delito contra Dios”, según informaciones de la cadena ‘Iran International”.
Recordemos que Azadani militó en diversos clubes de Irán y que el sindicato internacional de jugadores, FIFPRO, pidió “la eliminación inmediata de su castigo” al igual que se manifestaron en ese sentido distintos organismos ligados a los derechos humanos.
Otras tres nuevas condenas a muerte
En el mismo juicio por el que pasó Amir Nasr Azadani, los ciudadanos iraníes Saleh Mirhashemi, Majid Kazemi Sheikh Shabani y Saeed Yaqoubi fueron sentenciados a muerte por “moharebe” o “enemistad contra Dios” por el asesinato de los basijis en Isfahan.
Además de la pena de muerte, estas tres personas fueron condenados a 10 años de prisión. Con esta sentencia se suman a las al menos 11 personas condenadas hasta ahora a la pena máxima.
Un quinto acusado, Soheil Jahangiri, fue condenado a dos años de prisión por su participación en los mismos hechos, y un sexto, Jaber Mirhashemi, fue declarado absuelto.