La Selección Argentina, liderada por Lionel Messi, derrotó 3-0 a Italia en el marco de la Finalissima que se jugó en Wembley, Inglaterra, y se quedó con otro título oficial de la FIFA. Los goles fueron obra de Lautaro Martínez, Ángel Di María y Paulo Dybala. La producción colectiva, de las mejores en la era Scaloni.
En ese contexto, y atentos al camino hacia el Mundial Qatar 2022, Argentina pisó fuerte desde el comienzo del partido ante un poderoso elenco europeo, que por esas cosas del fútbol no estará en la próxima Copa del Mundo, y que puso en aprietos a los de Scaloni en varias ocasiones en el césped de Wembley.
La gran performance de Lionel Messi, Ángel Di María y Nicolás Tagliafico, principalmente, sirvieron para cimentar una producción que generó dos lindos goles en un primer tiempo inmejorable. Jugada de Messi y definición de Lautaro; jugada de Lautaro y definición de Di María, que la volvió a picar en una final. 2-0 y alegría.
La segunda parte fue aún mejor. Argentina tomó dominio de la pelota y generó no menos de cinco chances claras de gol. Lo tuvo Lo Celso dos veces, Messi otra y Di María intentó siempre. Italia, en tanto, nunca encontró el ritmo de juego deseado y se vio ampliamente superada por una Selección Argentina que fue voraz.
La frutilla del postre llegaría en el minuto 92. Paulo Dybala capturó un rebote tras una jugada de Messi en una contra argentina y definió cruzado para sellar la goleada. Impresionante.
Evidentemente, fue de unas de las mejores producciones en la era Scaloni y el sueño hacia el Mundial Qatar 2022 está intacto.