Argentina cayó el miércoles 2-0 ante Suecia y fue eliminada sin cumplir su sueño de ganar un partido en un Mundial femenino, mientras Sudáfrica derrotó a Italia y seguro un lugar en octavos de final.
Con los resultados, Suecia avanzó como primera del Grupo G, tras ganar sus tres partidos, mientras Sudáfrica avanzó como segunda del grupo. Con ello, el domingo se enfrentarán Suecia contra Estados Unidos y Sudáfrica contra Países Bajos, que ganó el Grupo E.
”Nos vamos conformes, las jugadoras lo dieron todo, podemos dormir tranquilos, pero nos vamos tristes porque queríamos ganar, clasificar, manipular esa ilusión”, declaró tras el partido el seleccionador argentino Germán Portanova, quien precisó los problemas de su equipo.
”El aspecto físico es una deficiencia que Argentina tiene que corregir. Siempre que se hace una jugada, capaz que no termina en la profundidad que queremos al no tener esa velocidad y esa potencia” que tienen otras selecciones.
Suecia rompió el esquema ordenado defensivo argentino al minuto 66 con un centro de Sofia Jakobsson conectado de cabeza por Rebecka Blomqvist. Elin Rubensson marcó el 2-0 definitivo de penal en los 90.
En el otro duelo del Grupo G, Sudáfrica venció a Italia 3-2 en un partido que dejó hasta el último instante la definición del segundo cupo a los octavos.Italia comenzó ganando con un penal marcado por Arianna Caruso (11).Sudáfrica igualó momentáneamente al 32 con un autogol de la italiana Benedetta Orsi, y amplió Hildah Magaia (67). La italiana Caruso convirtió el tanto del empate (74), pero la sudafricana Thembi Kgatlana terminó in extremis el gol de la victoria (90+2), en Wellington.
Pese a que Argentina llegó al duelo con escasas posibilidades de clasificar, una nutrida y alegre barra argentina cantó y saltó todo el partido para animar a su equipo en el Waikato Stadium de Hamilton.
La mayor parte del duelo se jugó en territorio defensivo argentino, aunque las albicelestes tuvieron acciones de peligro con sus atacantes Mariana Larroquette, Romina Núñez y Estefanía Banini.
La defensa argentina se plantó bien y con orden para repeler las embestidas de las fuertes jugadoras suecas, en especial la atacante Rebecka Blomqvist y las volantes Olivia Schough y Hanna Bennison. Así, el eficiente juego defensivo en la primera parte permitió que la arquera Vanina Correa no se viera en mayores aprietos.
Hacia el final de los primeros 45 minutos, Argentina perdió por lesión a una de sus piezas clave, la combativa volante Florencia Bonsegundo, sustituida por Daiana Falfán.