Diego Schwartzman rindió de mayor a menor y lo pagó con la derrota en la final del Argentina Open, donde defendía el título y fue superado por el noruego Casper Ruud por 5-7, 6-2 y 6-3.
El “Peque”, ubicado en el puesto 15 del ranking mundial de la ATP, se fue desinflando a partir del segundo set y perdió al cabo de dos horas y 34 minutos con Ruud (8), quien estiró a 16 partidos su invicto sobre polvo de ladrillo y reconquistó el trofeo del ATP porteño que había ganado en la edición 2020.
Un estadio Buenos Aires Lawn Tennis Club con la cancha central Guillermo Vilas al tope de su capacidad, con 4.950 espectadores, fue el escenario que albergó la final entre los dos máximos favoritos y que se decantó por el jugador extranjero, quien atraviesa el mejor momento de su carrera y no para de acumular títulos en polvo de ladrillo.
El noruego, nacido en Oslo hace 23 años, conquistó el año pasado los torneos de San Diego, Kitzbuhel, Gstaad, Bastad y Ginebra, que sumados a los dos en Buenos Aires elevan a siete su cosecha personal.
Ruud inscribió por segunda vez su nombre en la nómina de campeones del Argentina Open, siendo el tercero que logra conquistarlo dos veces; los anteriores fueron el español Carlos Moyá en 2003 y 2006, y el austríaco Dominic Thiem en las ediciones de 2016 y 2018.
El único tenista que conquistó tres veces el ATP porteño fue el español David Ferrer en años consecutivos: 2012, 2013 y 2014.
Antes de la final de singles se jugó la de dobles, y hubo un argentino que gritó campeón, Andrés Molteni, junto al mexicano Santiago González.
Molteni y González emplearon apenas 47 minutos para vencer en la final al marplatense Horacio Zeballos y al italiano Fabio Fognini por 6-1 y 6-1.