Con un gol agónico del ingresado Samuel Chukwueze, Villarreal igualó 1-1 con Bayern Múnich en el estadio Allianz Arena y se metió en la semifinal de la Champions League, luego de que en la ida el conjunto de los argentinos Gerónimo Rulli, Juan Foyth y Giovani Lo Celso consiguiera un sorpresivo triunfo por 1-0.
Si bien gran parte de los primeros 45 minutos se jugaron en campo español, Bayern Múnich no pudo generar muchas ocasiones de riesgo a pesar de acumular varios jugadores en ataque. Los de Unai Emery, en tanto, cumplieron uno de sus objetivos, que era mantener el cero en el arco.
Pero solo lo pudieron hacer hasta los siete del segundo tiempo, cuando Thomas Müller aprovechó un en salida de Daniel Parejo y asistió al temible Robert Lewandowski, que la puso pegada al palo izquierdo de Rulli.
Defender en la puerta de su área terminó siendo una jugada muy arriesgada de Villarreal ante la jerarquía del local, el único que buscó el gol. Algo esperable, pero no tan al extremo. Y es que eso provocó el vendaval del equipo de Julian Nagelsmann, al que le faltó inteligencia para estirar la ventaja en el marcador.
El primer cambio del Submarino Amarillo se dio con el ingreso del nigeriano Samuel Chukwueze, a falta de siete minutos, quizá planificando el alargue. Una le iba a quedar a la visita, que se salvó de la expulsión de Foyth, la aprovechó.
Al entrenador español le salió el campo para propinarle un nuevo golpe a Bayern Múnich, que se quedó afuera en cuartos por segunda temporada consecutiva (la anterior había sido ante PSG).
Fue un pase al hueco de Gerard Moreno para Chukwueze que un mano a mano ante Neuer anota lo que sería un gol histórico, como para emular lo que ocurrió en la temporada 2005-06 con Juan Román Riquelme y Manuel Pellegrini a la cabeza.