Boca todavía no saltó a la cancha, recién lo hará a las 21 cuando se mida con Nacional de Potosí, pero tranquilamente puede decirse que ya empezó a jugar la Copa Sudamericana y todo lo que eso conlleva. Claro, es que para poder presentarse en los casi 4.000 metros del Estadio Víctor Agustín Ugarte, primero el plantel deberá afrontar una travesía que implicará tres horas de viaje en camionetas 4x4 y en grupos separados, algo completamente inédito e inusual en el alto nivel.
Luego de pasar la noche en Sucre, donde hizo base dado que en Potosí no hay aeropuertos habilitados ni capacidad hotelera suficiente para toda la delegación, a horas del mediodía los futbolistas se trasladarán a la sede del partido en unas combis adecuadas para sortear una ruta sinuosa durante más de 150 kilómetros.
Por una cuestión de organización, cada vehículo llevará a tres personas y en principio está estipulado que lleguen al recinto del Rancho en dos grupos distintos para luego encontrarse todos en el destino señalado.
La buena noticia es que al hacer el viaje en camioneta, el plantel reducirá a la mitad el tiempo del traslado que en colectivo duraría seis horas; es decir, el doble. Además, en Boca cuentan con la ventaja de que, más allá de tratarse de un camino complejo, ya es conocido para el fútbol argentino porque lo realizó Estudiantes de La Plata en 2017, por el mismo certamen, cuando visitó a Nacional y se impuso por 1-0 con un tanto de Lucas Rodríguez.
Boca debutará en uno de los estadios más altos del mundo
Por otro lado, un aspecto que Boca deberá tener en cuenta es que su estreno será en un ambiente hostil: la altura.
El Estadio Víctor Agustín Ugarte está situado a 3885 metros sobre el nivel del mar, más que en La Paz, y es una de las pocas canchas a nivel mundial situada en una planicie tan elevada.